Comunicación Política y Estrategias Electorales

En la comunicación política, la percepción de la realidad es lo que realmente cuenta, no importa la realidad objetiva. Lo que la gente percibe es lo que define la realidad.

La percepción pública de un candidato o figura política es más importante que su imagen personal, ya que determina la opinión del público.

La comunicación no verbal abarca el 96% de la comunicación humana, mientras que la comunicación verbal solo el 4%.

La comunicación no verbal incluye gestos, actitudes, sentimientos, colores utilizados, movimientos del cuerpo, etc.

A principios del siglo XX se empezó a estudiar la comunicación no verbal para comprender mejor las emociones y el carácter de las personas.

La comunicación no verbal desempeña un papel crucial en la comunicación política, ya que influye en la percepción del público.

La comunicación no verbal es importante porque no solo importa lo que se dice, sino también quién lo dice y cómo lo dice.

Un discurso bien elaborado puede ser ineficaz si el orador muestra un lenguaje corporal negativo, como hombros caídos, voz apagada y mirada errática.

El mensaje es un elemento fundamental en una campaña electoral, pues transmite las ideas y propuestas del candidato a los votantes.

Los temas y mensajes de una campaña deben ser relevantes para los votantes, abordar sus necesidades y preocupaciones, y estar alineados con la propuesta del candidato.

Un mensaje efectivo debe ser claro, conciso, memorable, auténtico y creíble. Debe ser fácil de entender y recordar.

Los medios de comunicación juegan un papel crucial en la difusión del mensaje de la campaña, llegando a un amplio público.

El objetivo de la campaña de comunicación es lograr el reconocimiento de marca del candidato, transmitir su mensaje y aumentar su apoyo en la opinión pública.

La presentación en medios de comunicación debe ser estratégica, utilizando diferentes plataformas para llegar al público objetivo de manera eficaz.

La imagen del candidato es un elemento clave que influye en la percepción del público. Debe ser auténtica y congruente con su mensaje.

El posicionamiento es el lugar que el candidato busca ocupar en la mente de los votantes. Debe ser claro, único y diferenciarse de la competencia.

La percepción que tiene el público sobre un candidato, basada en su historial y experiencia previa. Esta imagen puede ser difícil de cambiar, incluso cuando se postula para un cargo diferente.

Un proceso que requiere tiempo, inteligencia y estrategia estratégica para modificar la percepción que tienen los votantes sobre un candidato.

El discurso o mensaje que un candidato transmite al público para persuadirlo a votar por él.

El mensaje político debe estar adaptado a la estrategia general de la campaña, las expectativas de los votantes, las tradiciones del partido, las estrategias adversarias, las características personales del candidato y el presupuesto.

Un mensaje de refuerzo se dirige a los partidarios del candidato, recordando sus cualidades y valores.

Un mensaje de polémica se utiliza para atacar a los adversarios políticos, resaltando sus debilidades o errores.

Un mensaje de persuasión se dirige a los votantes indecisos, presentando argumentos convincentes para que se inclinen por el candidato.

Es crucial identificar los temas centrales que se comunicarán a todo el público durante la campaña. Estos temas deben ser mencionados en todos los mensajes, discursos, notas de prensa y publicidad.

Un medio de comunicación poderoso que alcanza a un amplio público, desde áreas rurales hasta urbanas. Su ventaja es su accesibilidad a todos y su bajo coste.

La prensa escrita tiene la capacidad de crear noticias con profundidad, investigaciones y titulares destacados, que luego son difundidos por otros medios.

La publicidad en campañas electorales transforma el discurso político en mensajes cortos y emotivos, con el objetivo de atraer a los votantes.

Es de suma importancia para que el candidato se dé a conocer al electorado, proporcionando información sobre su vida, personalidad y trayectoria.

El candidato debe ser visto como un personaje en escena, con un mensaje claro y definido.

La creación de una campaña electoral es como una obra de arte, donde cada detalle, desde el escenario hasta el mensaje, debe ser cuidadosamente planeado.

Un medio crucial, ya que utiliza imágenes, videos y sonido para comunicar el mensaje político y conectar con la audiencia.

Es importante que el candidato se adapte a la cultura y las tradiciones de la región donde se presenta, para lograr una conexión genuina con los votantes.

El Programa Ágora Democrática busca renovar y fortalecer los sistemas de partidos políticos en los países andinos.

El programa Ágora Democrática se divide en cuatro áreas: capacitación, cooperación técnica, investigación aplicada y diálogo y creación de redes.

El objetivo final del programa es promover sistemas de partidos políticos más fuertes, estables y democráticos en los países andinos.

El programa trata de crear una cultura política en la que los partidos políticos trabajen juntos, busquen consensos y se comuniquen con la sociedad civil.

El programa Ágora Democrática busca mejorar la democracia interna y la transparencia financiera de los partidos políticos.

Las primeras 20 segundos de un discurso son cruciales para captar la atención del público. Una introducción efectiva logra conectar con la audiencia y prepararla para el mensaje.

Es el punto donde se presentan al orador y al partido político al que representa. Es la oportunidad de generar una primera impresión positiva.

La información principal que el orador quiere que el público recuerde. Deben ser ideas claves que resuman el mensaje.

El orador comunica las acciones que espera del público después del discurso. ¿Qué quiere lograr con su mensaje?

Conexiones fluidas entre las diferentes partes del discurso. Permiten que el mensaje sea fácil de seguir y entender.

Dedicar el mismo tiempo a cada punto principal, evitando dedicar excesivo tiempo a uno específico.

Repetir el nombre del partido político en cada punto principal. Ayuda a la audiencia a asociarlo con las ideas del discurso.

La conclusión tiene un papel crucial para finalizar el discurso. Refuerza los puntos claves, da pautas para la acción y motiva a la audiencia.