La Edad Media: tres culturas y un mapa político en constante cambio

Ruta de peregrinación que ha estado activa desde la Edad Media.

Período histórico que abarca desde el siglo V hasta el XV en Europa.

Crecimiento de las ciudades y el comercio.

Unificar a los reinos cristianos de la península ibérica.

Pastores que usaban el Camino de Santiago para trasladar sus rebaños.

La monarquía visigótica era la que gobernaba la Península Ibérica antes de la invasión musulmana en el año 711.

El territorio conquistado por los musulmanes en la Península Ibérica recibió el nombre de Al-Andalus.

El Emirato Dependiente es el primer período de la dominación musulmana en la Península Ibérica.

Los Omeyas son la dinastía que comenzó a gobernar Al-Andalus a partir del año 756.

Abderramán I fue el primer emir de la dinastía Omeya en Al-Andalus.

Abderramán III fue el primer califa de Al-Andalus y el primer califa Omeya de Córdoba.

Córdoba fue la capital de Al-Andalus durante la época califal.

Almanzor fue el último gobernante importante del califato cordobés.

Los Reinos de Taifas es el período que siguió al califato de Córdoba.

Covadonga es considerada la primera victoria militar de los cristianos frente a los musulmanes.

El período en el que los reinos cristianos reconquistaron territorios musulmanes en la Península Ibérica, comenzando en el siglo X y acelerándose significativamente en el siglo XII.

El proceso de establecer poblaciones cristianas en territorios previamente controlados por musulmanes, a menudo después de la expulsión o desplazamiento de los habitantes musulmanes.

Un conjunto de leyes, derechos y privilegios locales otorgados a una ciudad o pueblo por el rey, generalmente para fomentar el comercio y el asentamiento.

Las clases sociales en la sociedad medieval, definidas por su estatus legal y generalmente basadas en el nacimiento.

Un sistema que aseguraba la herencia de las propiedades familiares (generalmente tierras) a un solo heredero dentro de una familia noble, preservando la riqueza y el estatus familiar.

Cristianos que vivieron en Al-Andalus pero mantuvieron su fe y cultura.

Personas de origen hispano-romano y visigodo que se convirtieron al Islam en Al-Andalus.

Musulmanes que vivieron en los reinos cristianos después de la conquista de Al-Andalus.

Una organización de pastores en Castilla que tuvo una gran influencia en la Edad Media y el período moderno temprano, importante por sus derechos de pastoreo para el ganado.

El último estado islámico en la Península Ibérica, que sobrevivió por más de 200 años gracias a sus fuertes defensas, fortificaciones, un ejército bien entrenado y las divisiones dentro de los reinos cristianos.

El fenómeno Mudejar, exclusivo de la Península Ibérica, tuvo un impacto significativo en la agricultura. Se introdujeron nuevas técnicas de cultivo, incluidos sistemas de riego, y se cultivaron cosechas como el arroz, la berenjena y las alcachofas.

La sociedad de Al-Andalus estaba estructurada con gobernantes musulmanes que supervisaban una población diversa, incluyendo musulmanes convertidos (Muwallad), aquellos que conservaban el cristianismo (Mozarabes) y judíos.

Una guerra civil entre los hijos de Witiza, el último rey visigodo, y Rodrigo, el usurpador, condujo a la conquista musulmana a principios del siglo VIII. Las fuerzas musulmanas, ayudadas por tribus bereberes del norte de África, conquistaron rápidamente la mayor parte de la Península Ibérica, excepto las regiones montañosas del norte, marcando el comienzo del dominio islámico.

Durante este período, Al-Andalus fue gobernado por gobernadores (emires) que estaban subordinados al Califa de Damasco. Surgieron conflictos entre los grupos árabes y bereberes, lo que obstaculizó el poder de los emires y permitió la supervivencia de las comunidades visigodas en el norte.

En 750, el califato omeya fue derrocado por los abasíes, lo que llevó a un príncipe refugiado, Abd al-Rahman I, a establecer un emirato independiente en Al-Andalus. El poder político residió en el emir, aunque la lealtad religiosa permaneció con los califas abasíes.

Abd al-Rahman III fortaleció el estado, estableciendo un poderoso ejército permanente y centralizando los recursos fiscales. Esta época marcó la edad de oro de Al-Andalus.

Almanzor, un poderoso líder militar, controló al Califa y dirigió la política. Construyó un nuevo ejército, compuesto por bereberes del norte de África y mercenarios cristianos, para realizar incursiones contra los reinos cristianos y mantuvo el control interno. Comandó el tesoro y tomó decisiones políticas independientes.

Tras la muerte de Almanzor, surgió un período de luchas internas (una "guerra civil"), que fragmentó Al-Andalus en numerosos reinos taifas independientes.