Biomas y Climas del Mundo

La tundra es un bioma frío con temperaturas bajo cero durante gran parte del año, suelos permanentemente congelados y una vegetación baja y escasa.

Los musgos y los líquenes son las plantas predominantes en la tundra, ya que pueden tolerar las temperaturas bajas y los suelos pobres.

Los desiertos son biomas caracterizados por una escasez extrema de precipitaciones, lo que lleva a una baja vegetación y a temperaturas que pueden ser muy altas o muy bajas.

Los cactus, adaptados a las condiciones áridas con sus espinas para retener agua, son la vegetación dominante en los desiertos.

El clima ecuatorial se caracteriza por temperaturas cálidas y elevadas precipitaciones durante todo el año, lo que lo hace ideal para la exuberante vegetación tropical.

La sabana es un bioma con un clima cálido y seco durante gran parte del año, con pastizales abiertos y arbustos dispersos.

Los baobabs y las acacias son dos de los tipos de árboles característicos de las sabanas, con sus formas distintivas y capacidad de adaptarse al clima estacional.

El clima mediterráneo se caracteriza por veranos cálidos y secos, inviernos templados y húmedos, con inviernos húmedos y veranos calientes.

Los bosques mediterráneos están compuestos por árboles adaptados a las sequías estivales, como los pinos, los encinas y la vegetación arbustiva como el maquis.

El clima oceánico se caracteriza por temperaturas suaves y abundantes precipitaciones debido a su proximidad al mar, lo que crea un clima moderado.

Los bosques caducifolios están dominados por árboles que pierden sus hojas en otoño, como robles, hayas y abedules, adaptados a las estaciones del año.

La taiga se encuentra en climas fríos, con inviernos largos y fríos y veranos cortos y frescos, caracterizados por su baja diversidad de especies.

Las praderas están dominadas por hierbas altas que crecen en zonas con precipitaciones moderadas y suelos fértiles, con veranos cálidos e inviernos fríos.

El clima polar se caracteriza por temperaturas extremadamente bajas durante todo el año, con inviernos largos y oscuros y veranos cortos y fríos, con precipitaciones escasas en forma de nieve.

La selva tropical, también conocida como bosque lluvioso, es un bioma caracterizado por una elevada biodiversidad, grandes cantidades de lluvia, temperaturas cálidas durante todo el año y una vegetación densa.

El clima desértico frío se caracteriza por temperaturas que oscilan entre temperaturas frías en invierno y cálidas en verano, con baja humedad y poca precipitación.

Los desiertos fríos tienen plantas adaptadas al frío extremo y la falta de agua, con plantas como los cactus y los musgos.

Las praderas son biomas con una vegetación predominante de hierbas altas, adaptadas a suelos fértiles y precipitaciones moderadas, con veranos cálidos e inviernos fríos.

La sabana, con su clima cálido y seco, tiene una vegetación caracterizada por árboles dispersos que ofrecen sombra, como los baobabs y las acacias, junto con hierbas altas que cubren el terreno.

Los climas mediterráneos se encuentran alrededor del Mar Mediterráneo, pero también en otras zonas del mundo, con veranos cálidos y secos e inviernos suaves y húmedos.

La laurisilva es un tipo de bosque húmedo con árboles de hoja perenne, como el laurel, el ficus y el bambú, que son típicos de lugares con clima cálido y húmedo.

El clima oceánico se caracteriza por temperaturas suaves e influenciado por la proximidad al mar, con abundantes precipitaciones y un clima moderado, como encontramos en zonas del norte de Europa y Nueva Zelanda.

La taiga es un bioma de coníferas que se caracteriza por coníferas como pinos, abetos y píceas, adaptadas a las latitudes altas con inviernos largos y fríos, con una baja diversidad de especies.

La pradera atlántica es un bioma con una vegetación predominante de hierbas altas y praderas húmedas, influenciada por la humedad del Océano Atlántico, con una diversidad de plantas herbáceas y arbustivas.

Las zonas cercanas a los polos se caracterizan por temperaturas extremadamente bajas durante todo el año, con inviernos largos y oscuros y veranos cortos y fríos, con precipitaciones escasas en forma de nieve.

El clima oceánico es uno de los climas comunes en la zona templada, caracterizado por temperaturas suaves durante todo el año y abundantes precipitaciones.

Una de las características del clima continental es la gran diferencia de temperatura entre verano e invierno, con veranos calurosos e inviernos fríos, debido a la influencia de la tierra en lugar del mar.

El bosque mediterráneo se caracteriza por una vegetación adaptada a las sequías estivales, con pinares, maquis (vegetación arbustiva densa) y garriga (vegetación arbustiva baja y abierta).

Las praderas de estepa se caracterizan por una vegetación de hierbas cortas, adaptadas a climas semiáridos con lluvias escasas y suelos secos, con veranos cálidos e inviernos fríos.

Las zonas con altas montañas a más de 3000 metros de altitud tienen un clima de alta montaña, con temperaturas bajas, fuertes vientos y nieve durante gran parte del año, con cambios climáticos abruptos.