Análisis de texto

Study Notes

El esófago es un tubo muscular que transporta comida desde la boca hasta el estómago.
Mide aproximadamente 25-30 cm de largo y 2-3 cm de diámetro.
Utiliza peristalsis, una contracción muscular en forma de onda, para impulsar la comida hacia el estómago.

El intestino delgado es responsable de la mayoría de la absorción de nutrientes en el cuerpo.
Se divide en tres secciones: duodeno, yeyuno e íleon.
Las paredes del intestino delgado están revestidas de proyecciones digitiformes llamadas vellosidades, que aumentan la superficie para la absorción.
Los nutrientes se absorben en la sangre a través de las paredes del intestino delgado y se transportan al hígado para su procesamiento.

El intestino grueso, también conocido como colon, es responsable de la absorción de agua y electrolitos, así como del almacenamiento y eliminación de desechos.
Absorbe aproximadamente 1-2 litros de agua por día, lo que hace que las heces sean más sólidas.
El colon también absorbe electrolitos, como sodio y potasio, para ayudar a regular el balance de fluidos en el cuerpo.
El intestino grueso es el hogar de una comunidad diversa de microorganismos, conocida como microbioma intestinal, que juega un papel crucial en la función del sistema inmunológico y la salud en general.

El estómago es un órgano muscular sac-like que secreta enzimas digestivas y ácidos para descomponer la comida.
La mucosa del estómago secreta mucus para protegerse de las enzimas digestivas ácidas.
El estómago mezcla la comida con enzimas digestivas, como pepsina y amilasa gástrica, para descomponer proteínas y carbohidratos.
El estómago mezcla y tritura la comida durante aproximadamente 1-2 horas, convirtiéndola en una mezcla líquida llamada quimo.

La boca, también conocida como la cavidad oral, es el comienzo del sistema digestivo.
La boca contiene dientes, que descomponen la comida en piezas más pequeñas, aumentando la superficie para la digestión.
Las glándulas salivales producen saliva, que contiene la enzima amilasa para descomponer carbohidratos.
La lengua mezcla la comida con saliva y ayuda a formar un bolo, que se traga y se pasa al esófago.
El paladar blando y la úvula trabajan juntas para ayudar a mover la comida hacia la parte posterior de la garganta para tragar.