Adicciones y Trastornos del Estado de Ánimo

La concurrencia de un trastorno mental y un trastorno por consumo de sustancias.

El uso de múltiples sustancias de forma simultánea o continuada.

Enfermedad crónica del Sistema Nervioso Central (SNC) caracterizada por buscar y usar compulsivamente una sustancia a pesar de las consecuencias negativas.

La presencia de más de un trastorno al mismo tiempo, como un trastorno por consumo y un trastorno mental.

Problemas crónicos de comportamiento y formas de pensar que hacen difícil desarrollar relaciones sanas.

Un trastorno por consumo de alcohol que afecta a la salud y al funcionamiento.

Porcentaje de personas que consumen una sustancia diariamente en un grupo de edad específico.

La edad promedio a la que una persona empieza a consumir alcohol.

Cambios en el cerebro que ocurren con el uso prolongado de drogas, como la disminución de receptores de dopamina.

Necesidad de consumir más droga para conseguir el mismo efecto que antes.

Síntomas desagradables que aparecen cuando se deja de consumir la droga.

La sensación de placer o recompensa que provoca la droga.

La eliminación de la sensación de malestar al consumir la droga.

Situaciones en la familia que aumentan la probabilidad de desarrollar una adicción (como consumo de alcohol por los padres).

Situaciones en la familia que disminuyen la probabilidad de desarrollar una adicción (como un apego seguro).

Situaciones sociales que incrementan la probabilidad de desarrollar una adicción (como la pobreza).

El cannabis permanece mucho tiempo en la sangre, se acumula en la grasa corporal y si no se quema se mantiene ms tiempo en el organismo. Esto lo diferencia de otras sustancias como la cocana, la metanfetamina y el alcohol, que se eliminan ms rpidamente.

El cannabis permanece en la sangre hasta 336 horas, mientras que la cocana 48 horas, las metanfetaminas 37 horas y el alcohol 12 horas.

El cannabis se puede consumir por va oral o por inhalacin. La va oral produce efectos ms lentos pero ms potentes.

El consumo habitual de cannabis puede llevar al desarrollo delsndrome de dependencia, caracterizado por el descontrol conductual, en aproximadamente el 50% de los consumidores.

El consumo crnico de cannabis puede causar deterioro cognitivo en reas como la atencin, la memoria, la iniciativa y la capacidad para alcanzar objetivos.

El uso frecuente de cannabis puede aumentar el riesgo de episodios psicticos, prdromos de esquizofrenia, anhedonia, sndrome amotivacional y distimia.

En Espaa, el consumo de cannabis es ms frecuente en adolescentes que el consumo de alcohol, aunque ste ltimo aumenta significativamente con la edad.

La edad promedio a la que las personas empiezan a consumir cannabis en Espaa es de 18,3 aos, siendo ms tarda que el inicio del consumo de alcohol (16,5 aos) y tabaco (16,6 aos).

Factores que aumentan el riesgo de desarrollar esquizofrenia, como la personalidad esquizotípica, pensamiento inusual, sobreinclusión atencional, desorganización conceptual, anormalidades perceptivas, suspicacia, grandiosidad, o un breve síndrome psicótico intermitente.

El cannabis puede aumentar el riesgo de desarrollar esquizofrenia en personas con factores de vulnerabilidad. También puede adelantar la edad de debut de la psicosis en 2,7 años. Además, el cannabis puede inducir una psicosis diferente a la esquizofrenia primaria, caracterizada por deficiencias cognitivas.

Conjunto de síntomas que incluyen apatía, anhedonia, abulia, indiferencia hacia el entorno, incapacidad para planificar el futuro, empobrecimiento afectivo, tristeza, conducta abandonica, pérdida del impulso sexual, enlentecimiento psicomotor, deterioro de la comunicación y retraimiento social.

El síndrome desmotivacional se diferencia de la depresión en que la persona con síndrome desmotivacional no suele ser consciente de su sufrimiento y no lo expresa verbalmente. Un paciente amotivacional puede también sufrir depresión.

Trastorno que afecta al lóbulo frontal y se caracteriza por desinhibición conductual, impulsividad y lapsos atencionales.

Entrevistas que se utilizan en la evaluación de personas con trastornos por uso de sustancias. Se exploran diferentes aspectos como la demanda, historia toxicológica, repercusión personal y social, y se registra la medicación.

Parte importante de la entrevista de exploración que abarca el uso de sustancias ilegales, tabaco y alcohol. En el caso del cannabis, se pregunta sobre la presentación (tipo de producto), variedad y consumo diario.

Parte de la entrevista que explora las razones por las que se consume una sustancia (propósito), cuándo se consume y los síntomas específicos que se experimentan (intoxicación, abstinencia, ansiedad, etc.).

Un objetivo de reducción del consumo de sustancias que se establece con un día específico y se usa como punto de referencia para alcanzar la abstinencia.

Evitar los lugares, las personas, las situaciones y las actividades que están asociadas al consumo de sustancias.

Recompensas o motivaciones que se otorgan al paciente por abstenerse de consumir sustancias durante un período determinado.

Técnicas para rechazar los ofrecimientos de sustancias de manera clara y firme, sin agresividad ni pasividad.

Estrategias para evitar situaciones de riesgo, como el disco rayado, desvío atencional y tiempo-fuera.

Identificar las ideas, creencias y pensamientos que incitan a consumir sustancias.

Patrones de comportamiento repetitivos y automáticos que se realizan sin pensar, como rondar por un lugar donde se compraban las sustancias.

El sentimiento de culpa y fracaso que se experimenta al consumir drogas después de un período de abstinencia.

Gastos excesivos o poco razonables que pueden indicar problemas de control financiero o una posible adicción, especialmente si se relacionan con alguna sustancia.

Un cambio repentino o significativo en las relaciones sociales, la persona puede evitar interactuar con su grupo habitual, buscando nuevos amigos o grupos con quienes consumir.

Alejarse o evitar el contacto con la familia, puede ser un síntoma de vergüenza o culpa, o un intento de esconder el consumo.

Dificultad para dormir o dormir demasiado, el cambio habitual de patrón de sueño puede ser un indicador de problemas de salud física o consumo de sustancias.

Cambios repentinos en la dieta, pérdida de apetito (anorexia) o comer en exceso.

Consumir bebidas energéticas en exceso para mantenerse despierto o mejorar el rendimiento, puede estar relacionado con el uso de drogas.

Elementos que suelen relacionarse con el consumo de drogas, su presencia puede ser un indicador de una posible adicción.

Cambios emocionales como agresividad, falta de motivación o apatía, puede ser un reflejo de los efectos de las drogas.