Las preguntas que nos plantea el tecnoceno: El Individuo en la Modernidad PDF

Summary

Este documento explora la evolución del concepto de individuo a lo largo de la historia, desde el tecnoceno, las transformaciones sociales, económicas y políticas que configuraron las sociedades modernas y el advenimiento del capitalismo. Analiza la idea de "sociedad de los individuos", los soportes que facilitan su realización y cómo las diferentes concepciones del individuo han evolucionado a lo largo del tiempo.

Full Transcript

✨ Unidad 1 ★ Las preguntas que nos plantea el tecnoceno. Transformaciones sociales, económicas y políticas que configuraron las sociedades modernas. De la comunidad a los individuos como depositarios de derechos. Advenimiento del capitalismo. Algunas características...

✨ Unidad 1 ★ Las preguntas que nos plantea el tecnoceno. Transformaciones sociales, económicas y políticas que configuraron las sociedades modernas. De la comunidad a los individuos como depositarios de derechos. Advenimiento del capitalismo. Algunas características del estado moderno. Castel, El ascenso de las incertidumbres. ☆ La noción del individuo La idea de una “sociedad de los individuos” es actualmente un pensamiento consensuado, inscripto en la “declaración de los derechos del hombre y del individuo”, que pone como valor fundador de la modernidad a la figura del individuo libre y responsable. La responsabilidad del individuo es el principio de base para la edificación de la moralidad y la penalidad moderna, puntualmente, la restructuración del derecho –civil y penal– es en torno a la figura del individuo. La exaltación del individuo conquisto el mundo laboral, empresarial y administrativo, con la idea de un individuo responsable, arriesgado y emprendedor, necesario para maximizar la eficacia profesional y asumir las exigencias de la competitividad, frente a la nueva coyuntura económica en un contexto de competencia exacerbada. La celebración incondicional de las capacidades del individuo domina la experiencia concreta de muchos individuos, y genera formas problemáticas de existir como individuo (libre y responsable), incluso imposibilitándolo. La realización del individuo como libre y responsable depende de sus condiciones/los soportes, pero los soportes no están de entrada, ni para todos. La premisa de la autonomía (de la “declaración”) no es cuestionada, sino las condiciones bajo las cuales es mantenida (o traicionada), es decir, la tarea reside en deslindar la naturaleza de los soportes y mostrar la manera de sostener al individuo. Un abordaje objetivista sobre ¿Cuáles son las condiciones que gobiernan la posibilidad de ser un individuo? Los individuos están desigualmente respaldados para ser individuos debido a la existencia de individuos dotados con una manera distinta de las condiciones de base necesarias para conducirse como actores sociales capaces de garantizar su propia independencia, y se puede ser más o menos individuo en función de los soportes –o la ausencia de ellos–. Si el individuo moderno es realmente una construcción histórica (no una entidad eterna), es necesaria una restitución de las etapas de su constitución y un deslindamiento de los soportes que le otorgaron consistencia, respondiendo a tres interrogantes: 1. ¿Cuándo emerge –en qué momento y con qué soportes– la cuestión del individuo en la historia? 2. ¿Cuáles son las principales transformaciones que acompañan la historia del individuo? 3. ¿Cuáles son las figuras actuales del individuo moderno? ★ Prehistoria: Dios como primer soporte del individuo. La historia del individuo fue religiosa: el primer soporte del individuo fue Dios (es decir, el primer reconocimiento trascendental como individuo) en conceptualizar al individuo dotado de un valor esencial, aunque en un individuo fuera del mundo terrenal: el reino divino gobernaba sobre las almas, pero no sobre el mundo. La promoción del individuo moderno es una laicización de lo religioso, con el retorno del “individuo fuera del mundo” hacia un “individuo en el mundo”: la realización del individuo religioso era la renuncia al mundo, mientras que la realización del individuo moderno era el dominio del mundo. La salida de la sociedad holística fue simultánea al aflojamiento de las coerciones colectivas, de la omnipresencia de las tradiciones, etc. La existencia del individuo moderno es salir de la inmersión en los sistemas de dependencia e interdependencia colectivos (que imposibilitan la valorización del mismo como tal). ★.La primera modernidad: la propiedad privada como soporte del individuo La garantía de existencia del individuo moderno, tras el abandono de su doble dependencia (de la coerción heredada y del orden preconstituido) solo perduró en la propiedad: el individuo moderno es ante todo el individuo propietario. El pensamiento liberal de Locke establece que el individuo moderno es propietario de sí mismo y poseedor de bienes, es decir, la propiedad es la condición posibilitadora de la independencia. La Revolución Francesa –en la Declaración– pone a la propiedad como la condición de posibilidad de la ciudadanía, de un individuo en el sentido positivo –no es únicamente un “valor burgués”–. La prueba está en La segregación de los individuos carentes de propiedad, individuos en el sentido negativo (ejemplo: la Asamblea Legislativa de 1791 excluyó del derecho a voto a quienes carecen de un mínimo de propiedad). La discriminación hacia el “no-propietario” se evidenció mayormente en el pauperismo1 social: no se consideraba individuo (no en el sentido positivo, de la Declaración) a la figura del trabajador – jornalero o peón–, del mendigo vagabundo, del criminal (por la inmoralidad de la conducta, la violencia manifiesta o representar una amenaza de subversión). El carácter esencial, fundamental y nuevo del pauperismo es la miseria y la subversión de la inteligencia, la pobreza y el rebajamiento del alma, el debilitamiento de la voluntad y de la energía, el sopor de la conciencia y de la personalidad. ★ La segunda modernidad: de la propiedad privada a la ciudadanía social. La salvación mediante el acceso a la propiedad es imposible para la mayoría de los “no-propietarios”: en el siglo xix, la situación salarial de un trabajador era indigna y miserable (con la esperanza ciega de independizarse del salario como un capitalista emprendedor). Sin embargo, con el desarrollo mercantil, la industrialización y la urbanización, el salariado se instaló irreversiblemente, planteando un dilema de la sociedad industrial: a. un salariado con precariedad extrema e inseguridad social, pero que implicaría una vulnerabilidad social y un riesgo de subversión interno; b. un salariado consolidado con una cierta protección “propia” (con diferencia de la propiedad privada, pero con cierto margen de posibilidad de asumir funciones de esta misma). La segunda opción fue prevalecedora, consiguiendo vincular protecciones al trabajo mismo: la nueva garantía es la propiedad social, en donde el no-propietario de bienes se convertía en propietario de derechos. La “invención de lo social” sería la invención de nuevas instituciones (derecho a la asistencia pública, protección social, derecho al trabajo, acceso a servicios públicos, etc.). El núcleo de esta propiedad social se construyó a partir de las instituciones del trabajo, que consolidó la condición salarial por medio de las protecciones, rompiendo además con la relación unilateral del empleo –capitalista y obrero–, tras la formación de convenios colectivos que protegen al individuo que no está protegido por la propiedad. La diferencia entre la propiedad privada y la propiedad social se desdibuja en la “ley sobre las jubilaciones obreras y campesinas”: por un lado, los defensores de la propiedad privada priorizan la libertad de ahorro, pero por el otro lado, los partidarios del seguro social dictaminan la obligación estatal de garantizar un derecho incondicional. Las relaciones de interdependencia entre individuos remplazaría las relaciones unilaterales de dependencia: la ciudadanía social –derechos sociales– es simétrica a la ciudadanía política –derechos civiles y políticos–. El nuevo perfil del individuo moderno sería un asalariado medio de mitad del siglo xx (década de 1960 o 1970) que no es propietario, pero posee estabilidad, posibilidades de progreso y un buen porvenir (con una vida no opulenta, pero capaz de vacacionar, auto-instruirse, participar políticamente, programar la escolaridad de sus hijos), es decir, un individuo construido desde el salariado protegido, aun en una relación de subordinación, pero que no aniquila la posibilidad de la independencia social. La superación de la propiedad privada, como el soporte necesario de la independencia social, implica la existencia y reconocimiento como individuos de pleno derecho a los miembros de la sociedad poseedores del basamento de derechos laborales. En la actualidad –la década de 1990–, la modernidad presenta dos comprobaciones: El perfil del individuo moderno continuó siendo mayoritario, pero la dinámica ha sido quebrada o detenida: la propiedad social y la ciudadanía social están amenazadas con un futuro incierto. El perfil del individuo moderno ya no es hegemónico, con la emergencia y el desarrollo de dos perfiles de individuo contemporáneo hipermoderno: el individuo por exceso y por efecto. ★ El Individuo Hipermoderno I: “Individuo por Exceso”. La característica primordial del individuo contemporáneo es “la existencia del individuo en total ignorancia de su existencia social”. El aumento de la subjetividad o el hiperindividualismo representa el punto inicial de una priorización del individuo “en sí” y “para sí”: el individuo encerrado en su individualidad hipertrofiada2 con un desprecio de lo social, que conlleva a una desconexión de la sociedad, un descompromiso. El “individuo por exceso” es precisamente un exceso de subjetividad, de narcisismo. El vacío social de muchos individuos es el efecto de una falta de encuadre en las regulaciones colectivas y una falta de conducción en las aspiraciones colectivas, con el objetivo de realizarse como individuos en un solipsismo3. La “sociedad de los individuos” no es una sociedad propiamente dicha, por la desligazón de todo vínculo y coerción colectiva. La sociedad actual se caracteriza por un gran número de individuos con un alto grado de capacidad autosuficiente (o creer en su autosuficiencia), es decir, en la posesión o creencia en la posesión de los soportes necesarios para la garantía de su independencia social. El individuo por exceso sobrelimita los efectos de características importantes de la coyuntura social actual: la descolectivización, la desinstitucionalización, el ascenso de un individuo ligado a un alejamiento de las pertenencias y los valores colectivos. ★ El Individuo Hipermoderno II: “Individuo por Defecto”. El “individuo por defecto” es un individuo atrapado en la contradicción de no poder ser el individuo que aspira a ser: ser un individuo independiente es un ideal altamente compartido (ejemplo: un joven aspirante a ser un emprendedor independiente –y no un jornalero como su padre– o un desempleado aspirante a trabajador bien remunerado). La falta de los soportes necesarios para asumir positivamente su libertad de individuos es la característica del individuo por defecto. Un carácter adicional es la desinstitucionalización del orden familiar: la estructura de una familia no se inscribe en una relación tradicional de autoridad (con una dependencia rígida de sus miembros), sino en una relación de consentimiento mutuo (con una reconocimiento de la individualidad de sus miembros). El individuo por defecto es realmente un individuo, pero en la falta de ser un individuo (no en el deseo, sino en los soportes para alcanzar ese deseo). El pasaje de la precariedad al precariado instala una impotencia para la realización como individuos, caracterizado por el estrato permanente de la división de trabajo (ejemplo: la permanencia en la precariedad, en el empleo temporario, en el desempleo), de la heterogeneidad (ejemplo: un empleado mal remunerado de clase baja o un gerente desempleado de clase media alta). En gran cantidad de casos, el trabajo no garantiza las condiciones mínimas de independencia económica y social. El individuo moderno, caracterizado por la posibilidad de independencia –con la propiedad privada y la propiedad social–, permanece centralizado en el dispositivo, pero la centralidad es erosionada por dos extremos: ★ Por arriba: es la promoción del “individuo por exceso” que podría tener la capacidad evasiva de la sociedad porque, debido a su abundancia de soportes, la misma deja de pesar sobre ellos. ★ Por abajo: es la multiplicación del “individuo por defecto” que perdió o no logró alcanzar el umbral de soportes de la propiedad social, sumado a la desprotección por no tener propiedad privada. Si el “centro” es la independencia del individuo, un individuo puede estar más o menos próximo al centro. ¿Cuáles son las condiciones que hacen posible la existencia del individuo? ★ La existencia de individuos necesita de soportes: el vagabundo de la sociedad pre-industrial es un ejemplo de un individuo ajeno al orden del trabajo y de la comunidad, o el proletario –separado de las relaciones tradicionales de dependencia– solo tiene su fuerza de trabajo. ★ La existencia de individuos necesita de un Estado: es el soporte de los soportes, tanto por ser el garante y defensor (derecho a la propiedad privada) como por ser el ejecutor (derecho a la propiedad social). Una sociedad más individualizada, más necesita del Estado, pero sin dejar de lado, la problemática articulación entre el individuo y el Estado. Bianchi. Historia Social del Mundo Occidental. La época de las revoluciones burguesas Revolución: La revolución es la solución política más extrema que puede adoptar un grupo de disensión, y tiene lugar cuando fallan los intentos legales y más moderados de lograr el reconocimiento o la reforma, o cuando la ideología del grupo revolucionario aboga directamente por la modificación radical y traumática de la situación existente. Aun cuando están fomentadas por una minoría política, las revoluciones suelen reflejar un clima popular de descontento. Ya se produzcan de forma espontánea (lo que suele ser raro) o tras una cuidadosa planificación, las revoluciones basan su éxito en un acusado sentido de la sincronización al movilizar las fuerzas con que cuenta, el aliento y con frecuencia el apoyo popular, y cuando menos el sustrato de una nueva organización dispuesta a gobernar. Burguesía: El término burguesía se aplicó por primera vez a los habitantes de las ciudades medievales francesas que no eran siervos ni pertenecían a la nobleza. Estas personas eran por lo general comerciantes y artesanos, y en épocas posteriores banqueros y empresarios. Con el desarrollo de las ciudades como centros comerciales, la burguesía empezó a cobrar importancia como clase socioeconómica. Más tarde, el término se convirtió en sinónimo de clase media-alta. En el siglo XVII, esta incipiente clase media defendía los principios de los derechos naturales y del gobierno constitucional frente a las teorías de los reyes por derecho divino y los privilegios de los soberanos y de la nobleza. Por ello, fueron los burgueses los que lideraron las revoluciones. Estas impulsaron la institucionalización de los derechos políticos y de las libertades personales para los ciudadanos de cada país como parte de un conjunto más amplio de derechos que englobaba el derecho de propiedad, la movilidad geográfica y la libertad de mercado, lo que beneficiaba a sus intereses económicos. “En el estado natural el hombre adquiere propiedad, mediante su trabajo extrae los frutos de la naturaleza para su uso individual; el trabajo confiere legalidad a la propiedad: la transforma en propiedad privada”. Las revoluciones burguesas aparecen para romper la forma natural de vida. Tales revoluciones fueron un proceso largo y complejo, que no solo puede ser explicado, bajo la presencia de la Revolución Industrial y Francesa que lo representa. La burguesía comienza un cuestionamiento clave en la historia, se rompía con esa concepción de vivir en comunidad, palabra clave dentro de las concepciones de Rousseau. Es clave porque para Rousseau, vivir en comunidad constituye la forma de vivir del hombre bajo intereses comunes inculcando ahí la solidaridad y fraternidad que constituye un vínculo fundamental en las relaciones de estos. Esta autoconciencia es el punto de partida, y en este punto de partida vamos a encontrar posteriormente la instalación del proletariado; las clases demoran en constituirse como tales. Es importante subrayar que las primeras elaboraciones teóricas del concepto de “revolución burguesa” fueron el fruto de un análisis centrado en los problemas de la revolución proletaria, por tanto la idea de revolución burguesa surgió esencialmente desde una definición negativa de revolución proletaria y no por lo que en sí misma representaba. La revolución burguesa se concibió como una coalición igualmente directa, entre la clase de los proletariados terratenientes feudales y naciente burguesía industrial. Fue muy difícil individualizar, en una clase inequívocamente burguesa y portadora directa del modo de producción capitalista en fase ascendente, el sujeto histórico principal de aquellas insurrecciones. Marx pensaba que la clase burguesa capitalista (los empresarios propietarios) era una clase reaccionaria que lograba mantener su posición predominante impidiendo el progreso del proletariado o clase trabajadora. Predijo que el proletariado se sublevaría para sustituir a la burguesía como clase económica dominante y asumiendo la propiedad de los medios de producción. La Revolución Industrial y la Revolución Francesa, son los mejores ejemplos del descontento de las clases burguesas. Revolución Industrial: El punto de partida de la Revolución Industrial fue en Inglaterra, a fines del siglo XVIII. Esta es un cambio radical de la forma social, económica, cultural y mercantil que se lleva a cabo en un corto tiempo. Entonces el título de “Revolución Industrial” es discutible: los cambios no fueron solo industriales, sino también sociales e intelectuales. Superficies que se habían cultivado, durante siglos, como campo abierto, o bien que permanecían en el abandono, como pastoreo, fueron vallados, las aldeas se convirtieron en populosas ciudades. Se hicieron caminos más rectos, fuertes y amplios que aquellas pobres vías de comunicación. La población aumentó notablemente. Nuevos intentos dieron muerte a viejos métodos de la vida diaria de la sociedad. La sociedad inglesa se vio conmovida y cambiada en sus rasgos centrales. Comenzó entonces la sociedad capitalista que giraba en torno del burgués que tenía un capital para poder formar una fábrica o una fuente de trabajo, y tener sus propios empleados, que al llegar al cumplimiento de un periodo, estos cobraban su sueldo. El obrero ya no debía trabajar para beneficio propio, sino que trabajaba para otros y era recompensado. También encontramos en esto una concepción del tiempo: el tiempo ya no es regulado por una orientación natural que tiene que ver con las condiciones que la naturaleza nos entrega (estaciones del año, configuración del día y la noche), lo que también se denomina “orientación al quehacer”. Ahora en cambio, el tiempo es un momento productivo. Una frase que explica claramente esta concepción del tiempo es la de Thompson: “el tiempo no pasa sino que se gasta”. Porque el tiempo será fundamental en la manera como el trabajo se fue asimilando cada vez más; esta disciplina frente al tiempo nos lleva a tener una concepción de vida capitalista. Comenzó entonces la etapa de cambio, surgió el transporte que resultó un recurso económico importante en escala nacional. A lo largo del tiempo desapareció el trabajo manual y domiciliario, porque gracias a los avances tecnológicos, se remplaza la mano del hombre por fábricas y máquinas de hilar. Para muchos industrializadores fue una competencia, porque ya nadie le daba trabajo al hombre, prefería las máquinas, que eran más rápidas y modernas. Esto hizo que el pueblo llegara al punto de destruir las maquinarias para detener así el avance tecnológico, porque se encontraban en una gran miseria. Los nuevos modos de trabajar gestaron la aparición de dos grupos sociales característicos del proceso industrial: los Obreros y los Empresarios Industriales; fue una realidad que involucró a la economía mundial. Esta fue la primera etapa de la revolución industrial. La segunda etapa comienza en el siglo XIX, ésta se encuentra basada en la conservación industrial. Se mejora el transporte, las comunicaciones y la aplicación de avances científicos en la producción industrial. Con el capitalismo ya surgido en la industria, comenzaron su ampliación los mercados consumidores. Comenzaron a trabajar mujeres y niños en tareas insalubres y bajas en remuneración, de 12 a 14 horas diarias, se crearon barrios obreros en los que se vivía sin tener en cuenta las más elementales normas higiénicas. Podemos asegurar que la revolución industrial fue un fenómeno determinante para establecer un dominio claro sobre las naciones subdesarrolladas. Es indiscutible que los inventos de esa época cambiaron completamente la forma en que la sociedad observa el mundo. “En las fábricas solo se tiene en cuenta los intereses de los dueños y no de los obreros, a pesar de que estos últimos hayan hecho posible la obtención de beneficios, que solo van a parar a las manos de los empresarios”. Revolución Francesa: proceso social y político acaecido en Francia entre 1789 y 1799, cuyas principales consecuencias fueron el derrocamiento de Luis XVI, perteneciente a la Casa real de los Borbones, la abolición de la monarquía en Francia y la proclamación de la I República, con lo que se pudo poner fin al Antiguo Régimen en este país. Aunque las causas que generaron la Revolución fueron diversas y complejas, éstas son algunas de las más influyentes: la incapacidad de las clases gobernantes —nobleza, clero y burguesía— para hacer frente a los problemas de Estado; la indecisión de la monarquía; los excesivos impuestos que recaían sobre el campesinado; el empobrecimiento de los trabajadores; la agitación intelectual alentada por el Siglo de las Luces y el ejemplo de la guerra de la Independencia estadounidense. Las teorías actuales tienden a minimizar la relevancia de la lucha de clases y a poner de relieve los factores políticos, culturales e ideológicos que intervinieron en el origen y desarrollo de este acontecimiento. La Revolución Francesa debemos pensarla y verla como la revolución intelectual de clase modernista o post-contemporánea científica que, sabedora de sus pensamientos vanguardistas, lucha por lograr una concepción de país y un sistema político, económico y social democrático, igualitario, nacionalista, donde el hombre siendo dueño de su libertad se entregue plenamente y sin medidas a escribir una historia personal y comunitaria pero con el derecho de ser tan diferente como él lo quiera. La burguesía, consciente de su papel preponderante de la vida política, social económica y cultural de Francia, desplazó del poder a la aristocracia y a la monarquía absoluta. Loa revolucionarios franceses no solo crearon un nuevo modelo de sociedad y estado sino que difundieron un nuevo modo de pensar por la mayor parte del mundo y que hasta el día de hoy lo vemos en la inspiración y fundamento para movimientos intelectuales y políticos de pequeños grupos o de grandes naciones. La Revolución Francesa la analizamos dentro del ciclo de transformaciones políticas y económicas que marcaron el fin de la edad moderna y el comienzo de la edad contemporánea. Juntamente con la independencia de EE.UU. y el desarrollo de la Revolución Industrial iniciada en Gran Bretaña, son procesos que señalan transición histórica de los conceptos evolución, desarrollo y perfeccionamiento, que el hombre ha buscado a lo largo de su historia. La revolución inició el camino hacia la separación de la iglesia y del estado. Nissbet postula que en la revolución francesa acontecieron los hechos que no ocurrieron en la revolución industrial, como la reconstrucción de valores del hombre y en donde influyen relaciones sanguíneas y no sanguíneas. El carácter específico de modo de producción feudal permitió un cierto grado de acumulación de capitales y de circulación acrecentadora de bienes en el seno mismo del propio orden económico. El capitalismo, como nuevo sistema económico, se desarrolló entre los resquicios del feudalismo; la burguesía, como nueva clase social, emergió del interior de la monarquía absoluta. La relación entre feudalismo y capitalismo es en este sentido fundamentalmente distinta de la que existe entre el capitalismo y el socialismo, ya que el socialismo no tiene ninguna forma determinada de existencia histórica, como modo de producción, ante la conquista del poder político por parte de la clase obrera. Por supuesto la propiedad feudal y la propiedad capitalista son fenómenos muy distintos, pero el dato central es que entre ellas no existe el abismo que separa la propiedad privada feudal o capitalista de la sociedad socialista o colectiva. “ La sociedad civil es la que se está desarrollando y no tiene otro origen que el desprendimiento de una parte de los derechos individuales de los sujetos que forman esa sociedad”. Debemos señalar que la transición del feudalismo al capitalismo no supone nunca una simple relación entre nobleza y aristocracia, por un lado, y burguesía por el otro. En efecto, el feudalismo, en cuanto modo de producción implica necesariamente la existencia de otra clase: los Campesinos, de cuyo trabajo toda aristocracia terrateniente obtiene sus riquezas y su poder social. Por su parte, el capitalismo implica, también necesariamente, la existencia de otra clase: los Obreros, de cuyo trabajo la burguesía extrae la plusvalía generadora de su riqueza y de su poder social. En otras palabras, la presencia difusa de clases populares, sean de la ciudad o del campo en el proceso de las Revoluciones Burguesas no es ni accidental ni casual. Es, al contrario, profundamente inherente a su auténtica naturaleza. La burguesía, por tanto, se distingue netamente, como clase histórica, tanto de la nobleza como de la clase obrera. El capitalismo, como modo de producción para imponerse en un determinado espacio, necesita de un estado nacional. Por ello toda burguesía nace, por definición, como enemiga potencial de cualquier otro estado o en general, de cualquier otra clase dominante extranjera, sea feudal o capitalista. Se puede sintetizar que la naturaleza de las revoluciones burguesas es ser desnaturalizadas o más bien presentan una estructura siempre compleja e irregular. En efecto se puede sostener que las revoluciones inglesa, norteamericana, italiana, alemana y japonesa fueron todas dirigidas por distintas clases vinculadas de alguna manera al campo. Estas clases agrarias de origen pre-capitalistas, su posibilidad de desarrollar un papel en las revoluciones que posteriormente han sido definidas como burguesas, dependían de la transformación de un tipo de propiedad privada en otro, esto es, de propiedad feudal a propiedad capitalista. Nunca se registró una expropiación de tierras nobiliarias por parte de la burguesía. En ningún caso las clases aristocráticas perdieron, de una sola vez, todas sus tierras o su poder por efecto de una revolución burguesa: esto es cierto incluso para la revolución francesa que a diferencia de las arriba citadas no fue en efecto una insurrección dirigida por la nobleza, sino precisamente una revuelta dirigida contra la misma. Se debe destacar el papel curiosamente marginal o periférico que desempeñó la burguesía industrial en la mayor parte de las grandes convulsiones revolucionarias. La única tarea histórica que llegaron a realizar, de manera plena, fue la construcción de un estado natural. No hubo revolución burguesa que no consiguiera este resultado solo con excepción de Italia. En el terreno social, ninguna de estas revoluciones destruyó la propiedad agraria de las clases aristocráticas o esclavistas preexistente, ni mucho menos realizó en todo el territorio nacional. Más bien en general, lo que se produjo fue un gradual proceso de amalgama o de confluencia entre las antiguas clases nobiliarias o ex feudales y las clases burguesas de más reciente formación. En el plano político no hubo nunca una revolución burguesa que instaurara un estado en algún modo similar a la democracia representativa capitalista que hoy conocemos. Además de ser incompletas, estas grandes revoluciones burguesas se caracterizan por su dinámica ordenada y regular. En efecto, resulta evidente que la posición cronológica que ocupó cada revolución no fue un deferente a su naturaleza. Antes bien constituyó una parte de su más íntima estructura. En el ciclo global de estas sublevaciones se pueden distinguir dos fases cronológicas. En la primera, el capital es esencialmente o en gran medida mercantil o agrícola, lo que quiere decir que estamos todavía en la época precedente a la revolución industrial. Por ello estas primeras revoluciones se caracterizaron por su gran turbulencia social espontánea, por la irrupción desde debajo de las masas populares en la vida política. “Se plantea una profunda preocupación por la política. Aporta de manera clara esa división de poderes que permite un juego moderado dentro de la sociedad. Siguiendo el discurso de los hombres de la ilustración, separa de la política las adherencias filosóficas o religiosas. Se establece un sistema de leyes, leyes que relacionan al hombre con la razón creadora y sirven también para relacionarse con o entre los individuos. Sobre el hombre caen una serie de leyes de carácter físico, leyes invariables de la naturaleza, que le afectan”. En el plano ideológico, casi todos los valores ideales de libertades burguesas nacieron precisamente al calor de estas insurrecciones y fueron forjadas sobre todo en la época de las revoluciones inglesa, americana y francesa. Pero el punto verdaderamente esencial de este primer tiempo de las revoluciones burguesas es la conexión que se puede claramente distinguir en cada una de ellas, entre lo que podríamos llamar la debilidad económica del modo de producción capitalista, todavía en su estado inicial y la violencia política, el radicalismo de los conflictos sociales que en ella se expresaron. Después de la revolución industrial en los primeros decenios del siglo XIX comienza una nueva fase. Las clases burguesas pueden ahora, de manera definitiva, transformarse en clases capitalistas industriales en sentido estricto de la palabra. Mientras simultáneamente, comienza a emerger la moderna clase obrera industrial de las grandes fábricas y de las minas. La línea cronológica que separa las dos fases del ciclo de las revoluciones burguesas la podemos situar en 1848, cuando en casi todos los países europeos se intenta remover el modelo jacobino de alianza entre burguesía y clases populares, sobre todo en las ciudades. Pero, como sabemos, las revoluciones de 1848 fracasaron precisamente porque ese tipo de pacto social se reveló ahora impracticable en adelante; a partir de ese momento las clases populares urbanas empezaron claramente a representar una potencial amenaza objetiva a la existencia misma de la burguesía como clase. En vez de la bandera de libertad, de la igualdad y de la fraternidad, la burguesía utilizaba ahora los ideales de la industria y de la nacionalidad para movilizar las masas. Gracias al desarrollo de esta moderna industria capitalista no era necesario acudir, como en el primer ciclo de revoluciones, a la movilización de las energías populares ni a la violenta lucha política contra el viejo orden. La Europa de la Restauración no permite ninguna ideología política más que la del absolutismo. Cualquier otra está en la clandestinidad. En la primera mitad del siglo XIX podemos distinguir dos ideologías principales y clandestinas: ★ Liberalismo: doctrina que defiende los derechos y libertades individuales. Defiende la igualdad jurídica y, rechazando el absolutismo, desea una monarquía constitucional o limitada. El liberalismo presenta dos tendencias: Liberalismo doctrinario (moderado), es el liberalismo de la alta burguesía. Limita a las libertades individuales. Defiende el voto restringido y la monarquía parlamentaria. Además cree que la soberanía debe pertenecer a las Cortes y al Rey. Sostiene que debe haber una Constitución/ Liberalismo democrático (progresista), es el liberalismo de la pequeña burguesía y los asalariados. Defienden las libertades individuales sin restricciones, el sufragio universal y la República. Sostienen que la soberanía debe ser nacional y creen en la Constitución. ★ Nacionalismo: se desarrolla en la clandestinidad hasta 1848. El nacionalismo del siglo XIX es una ideología compleja. Podemos hablar de un nacionalismo liberal, hasta 1848 y de un nacionalismo autoritario y conservador a partir de allí. El nacionalismo puede ser independentista o al contrario, unificador, que busca la formación de una nación a partir de la unión de varios territorios. Nace como un sentimiento, no como una ideología, el sentimiento de ser una nación. Se basa en poseer una lengua, tradiciones comunes que hacen que las personas se sientan unidas. Se convierte en ideología cuando se aspira a formar una nación independiente. Los orígenes de las ideas nacionalistas están en la Universidad. El nacionalismo surge como reacción a la invasión francesa de toda Europa. La Revolución la protagonizaron pequeños productores, campesinos y artesanos. ★ Se implantó, derivada de un orden económico y social capitalista, la libertad de empresa, que no era lo que buscaban las clases populares. ★ Destacó en la Revolución Francesa su radicalidad en la destrucción del Antiguo Régimen, por la participación del campesinado. El campesino de propiedades medias se satisfizo con revolución. Más adelante tendrá influencia en la Revolución Industrial. ★ Propósito de revoluciones sociales, que en el siglo XIX hará suyo el Movimiento Obrero. Concepto de igualdad en las relaciones sociales a nivel civil en todas sus formas. Libertad en toda su dimensión. ★ Se dará seguridad en la propiedad. Se mantienen los valores burgueses. Provocó desplazamientos del equilibrio social: ★ Campesinado medio consolida su situación. ★ Nobleza no desaparece. Se funde con la burguesía. Forma propietarios-empresarios que controlan la economía. ★ Nuevo grupo social: funcionarios públicos que relevan los anteriores oficiales reales. El suicidio - Durkheim. Durkheim plantea que el suicidio debe estudiarse como un hecho social. El autor destaca la importancia de definir claramente el concepto para evitar confusiones y asegura que el investigador debe construir los grupos de estudio para dotarlos de homogeneidad. La pregunta inicial es: ¿cómo determinar qué hechos específicos se agrupan bajo el término "suicidio"? Durkheim define el suicidio como "todo caso de muerte que resulte, directa o indirectamente, de un acto positivo o negativo, realizado por la víctima misma, a sabiendas del resultado". Es importante que la categoría incluya todos los actos voluntarios de la víctima, independientemente de si el acto es inmediato o diferido. La sociología del suicidio El suicidio, según Durkheim, debe entenderse desde una perspectiva social más que individual. No se trata simplemente de sumar actos independientes, sino de ver cómo cada sociedad tiene una “tasa de suicidio” específica, que se mide por la cantidad de muertes voluntarias en relación con la población total. Esta tasa representa la aptitud de una sociedad para generar suicidios y es un reflejo de su estado de cohesión social. El punto central del planteo de la sociología de Durkheim supone que un fenómeno es social –como el suicidio -siempre que se pueda determinar que sus causas son sociales. Para esto, el autor agrupa los suicidios en diferentes tipos que corresponden cada uno a un tipo de causa diferente. Tipos de Suicidio según Durkheim Durkheim clasifica el suicidio en tres tipos principales, basados en causas sociales distintas: Durkheim caracteriza según la distinción de causas sociales diversos tipos de suicidios. Los tres más relevantes para los análisis posteriores en el campo de la sociología: suicidios altruista, egoísta y anómico. Seleccionamos en los apartados siguientes aquellos tipos de suicidio que son específicos de las sociedades modernas: suicidio egoísta y suicidio anómico. A continuación se desarrolla el primero de estos tipos, aquel en que la sociedad está ausente pues no logra proporcionar integración a una parte de sus miembros. La progresiva desintegración de las sociedades religiosa, doméstica y política afecta la vida de los individuos ligados a ellas. Las preguntas que guiarán la lectura de este apartado son: - Qué entender por integración social? - Qué entender por egoísmo? ★ Suicidio Egoísta Ocurre cuando la integración social es débil y el individuo no siente conexión con el grupo. Este tipo es común en sociedades donde los vínculos comunitarios y religiosos son frágiles, como el protestantismo, que permite mayor libertad de interpretación y menor cohesión social en comparación con el catolicismo. En tiempos de crisis nacionales o políticas, estos suicidios tienden a disminuir porque los individuos se sienten más unidos a una causa común. Durkheim analiza cómo la falta de integración social lleva al suicidio egoísta. Este tipo se da cuando los lazos que unen al individuo con la comunidad se rompen, provocando aislamiento y soledad. Durkheim compara los índices de suicidio entre católicos y protestantes, concluyendo que la menor cohesión en la comunidad protestante, debido a la ausencia de un credo colectivo, genera una mayor propensión al suicidio. En sociedades religiosas con fuerte cohesión, como el catolicismo, las creencias comunes y las prácticas compartidas actúan como un freno contra el suicidio. De manera similar, en la sociedad doméstica, la integración familiar ayuda a prevenir el suicidio, especialmente en grupos familiares densos. 1 ★ Suicidio Anómico El suicidio anómico ocurre cuando la sociedad no puede regular los deseos e impulsos de los individuos. Durkheim señala que tanto las crisis económicas como los períodos de prosperidad pueden aumentar las tasas de suicidio, ya que ambos contextos generan una ruptura del equilibrio social. La anomia, o falta de normas, desestabiliza a los individuos, dejándolos sin un sentido de propósito o dirección. Los ámbitos donde la anomia afecta más son el comercio y la familia. En el contexto económico, la desregulación y la pérdida de influencia de la religión y otros poderes morales han generado una crisis constante en las relaciones industriales. En el ámbito conyugal, la anomia se manifiesta cuando el matrimonio pierde su función reguladora, especialmente en sociedades donde el divorcio es frecuente. Se da cuando hay un quiebre en las normas sociales y el individuo siente que su vida ha perdido significado. Este tipo es típico de sociedades modernas e industriales, donde la falta de regulación y la rápida transformación generan desorientación. La anomia surge en contextos como crisis económicas o cambios abruptos en la estructura social. ★ Suicidio Altruista Sucede en sociedades altamente integradas donde el individuo se siente completamente subordinado al grupo. Ejemplos incluyen el suicidio de guerreros que creen que su muerte es necesaria para el bienestar de su comunidad. Es característico de sociedades tradicionales donde el yo social predomina sobre el yo individual. En contraste con el suicidio egoísta, el altruista se produce en sociedades donde el individuo siente que su vida pertenece al grupo y su muerte puede beneficiar al colectivo. Este tipo es más común en sociedades tradicionales o menos desarrolladas, donde el yo social tiene mayor peso que el yo individual. El suicidio egoísta que se comete porque los hombres no ven la razón de vivir; el suicidio altruista donde los hombres ven la razón de vivir fuera de la vida misma; y el suicidio anómico, que surge porque la actividad social está desorganizada y genera mucho sufrimiento. Durkheim concluye que "los suicidios son fenómenos individuales que responden a causas esencialmente sociales". La integración o desintegración de la sociedad, junto con la presencia o ausencia de normas claras, determina la propensión de los individuos al suicidio. En última instancia, el estudio del suicidio revela cómo los fenómenos individuales están profundamente ligados a la estructura social en la que se desarrollan. Las reglas del método sociológico - Durkheim. De lo primero que se ocupa es de averiguar qué cualidades nos permiten distinguir un fenómeno sociológico de los de otro tipo, ya que el fenómeno social está ligado a lo que hace el hombre pero no cualquier cosa se puede considerar social. Otro aspecto que tiene en cuenta, es el hecho de que todos nos formamos prenociones (ideas sobre las instituciones en las que vivimos) pero las representaciones sociales espontáneas no se pueden tomar como un punto de partida. El punto de partida debe ser reconocer el propio desconocimiento. (La idea de su sociología es indicar los signos exteriores por los cuales se pueden reconocer los hechos sociales para que los investigadores los adviertan. Es decir trata de delimitar el campo de investigación). La sociología como el estudio de los hechos sociales, no hechos individuales ni psicológicos. Los hechos sociales son las formas de actuar sentir y pensar (Estas formas no son individuales, no es algo que el individuo ha producido subjetivamente, sino que son sociales, y por sociales entendemos externas y preexistentes a este) por que son externas al individuo y se le imponen coercitivamente (Es decir que se le impone al individuo de manera explícita, como leyes, decretos, etc, o de forma implícita, como usos, modales, modas, etc. Es fuerte o hábil) Durkheim dice que uno se da cuenta que se le ha impuesto cuando intenta saltarse algún hecho social. 2 La sociología parte de la sociedad hacia al individuo. El método de estudio es el explicativo causal. Existen hechos sociales estructurales (como por ejemplo las leyes laborales), o fluidos (Como opiniones o el lenguaje). Una vez definido el objeto de estudio de la sociología, se delimita su metodología, y Durkheim dice que los hechos sociales deben ser tratados como cosas, en el sentido de cosa como un constructo o como un concepto. Cosas morales con efectos materialmente registrables. “En pocas palabras, no decimos que los hechos sociales son cosas materiales, sino que son cosas como las cosas materiales, aunque de otra manera” Es una cosa positiva, medible, observable, etc., y es mediante la estadística que realizamos esto. De esa manera se puede buscar la correlación causal entre los hechos sociales; Durkheim cree que se puede realizar una investigación fáctica, tal como se da en las ciencias naturales, y descubrir o comprender que hechos sociales son causantes de otros hechos sociales, ¿Qué es realmente una cosa? La cosa se opone a la idea como lo que se conoce desde fuera se opone a lo que conocemos desde dentro. Cosa es todo objeto de conocimiento que no se compenetra con la inteligencia de manera natural, todo aquello de lo que no podemos hacernos una idea adecuada por un simple procedimiento de análisis mental, todo lo que el espíritu no puede llegar a comprender más que con la condición de que salga de sí mismo, por ,vía de observaciones y experimentaciones, pasando progresivamente de los rasgos más exteriores y más accesibles de manera inmediata, a los menos visibles y más profundos. Lo social sólo se explica por lo social ,no hace falta recurrir a explicaciones psicológicas o de otra índole, los hechos sociales tienen su lógica propia y autónoma, y puede ser explicado a través de otros. ★ Efectivamente, en este sentido puede decirse que todo objeto de ciencia es una cosa. Pero, cuando se trata de hechos propiamente dichos, en el momento en que emprendemos la tarea de hacer ciencia con ellos son necesariamente para nosotros incógnitas, cosas ignoradas, pues las representaciones que de ellos pudimos hacernos en el curso de la vida fueron hechas sin método y sin crítica, por lo que carecen de valor científico y debemos hacerlas a un lado. Durkheim dice que aunque nuestros pensamientos y emociones son internos, no los entendemos del todo solo por sentirlos. Es como cuando sentimos calor o vemos luz, solo tenemos una idea vaga. Por eso, se creó una psicología que estudia la mente desde afuera, como si fueran cosas observables. Entonces, si para entender nuestra propia mente necesitamos mirarla de manera objetiva, con más razón deberíamos hacer lo mismo con los hechos sociales. No alcanza con mirarnos a nosotros mismos para entender cómo funcionan las normas y costumbres que crea. Pero, para empezar, la mayor parte de las instituciones sociales nos son legadas, ya hechas, por las generaciones anteriores; nada tuvimos que ver en su formación y, por consiguiente, no es interrogándonos sobre ellas como podremos averiguar las causas que les dieron nacimiento.mos; tenemos que estudiarlas desde afuera, de manera objetiva y científica, para entenderlas bien. Más tarde el autor habla de la tarea del sociólogo; es preciso que, al penetrar en el mundo social, tenga conciencia de que penetra a lo desconocido. ★ Se relata que también se atacó a la proposición que establece a los hechos como externos y exteriores a los individuos, En esta parte del texto Durkheim se pone a dar ejemplos, como la del agua, donde dice que el todo de esta, sus propiedades y demás no se encuentran en los gases o partículas que lo componen, sino que están en la sustancia q forman, Da ese y un par de ejemplos de mas con el fin de querer aplicar tal principio a la sociología, si la síntesis sui generis que constituye a la sociedad produce nuevos fenómenos, es porque los hechos específicos están en la sociedad misma que los produce, no en sus partes (miembros) y por eso podemos decir que son exteriores de las conciencias individuales. (Durkheim está diciendo que cuando la sociedad se forma, crea cosas nuevas que no vienen de las personas individuales sino de la sociedad misma. Estos fenómenos sociales son únicos y no se originan en cada persona por separado, sino que existen gracias a la interacción y el funcionamiento de toda la sociedad. Por eso, se consideran externos a las conciencias individuales; es decir, no nacen dentro de cada individuo, sino que surgen de la sociedad en conjunto). 3 Los hechos sociales existen de manera definida, persisten en el tiempo, son constantes y su naturaleza no depende de lo arbitrario individual. La historia de la sociología es el prolongado esfuerzo que se hizo para precisar ese sentimiento, profundizarlo y desentrañar las consecuencias que implica. ★ Tener en cuenta que: un principio fundamental en la sociología de Durkheim es la realidad objetiva de los hechos sociales y sobre ese principio descansa todo y todo vuelve a él. Es así como esta ciencia sólo pudo surgir cuando se notó que los fenómenos sociales (por más de que no sean materiales) son cosas reales que ameritan un estudio. Por otro lado, considerar también que lo que hace que el hombre niegue la existencia de las fuerzas colectivas, es el hecho de que eso genera que esté condenado a sufrirlas sin poder modificarlas ★ Características del hecho social: 1. Exterior al individuo: por fuera de las conciencias individuales. 2. Coactivo: ejerce presión sobre el individuo. 3. Colectivo ★ Sociedad: Poder moral superior reconocido por el individuo. Autoridad que respetan y delante de la cual se inclinan espontáneamente. Poder regulador y moderador. Solo ella tiene la autoridad necesaria para declarar el derecho y marcar a las pasiones el punto más allá del cual no deben ir. La división del trabajo social - Durkheim. Durkheim busca explicar cómo se origina el aumento y la diferenciación de funciones en la sociedad moderna. Para él, la función principal de la división del trabajo es generar solidaridad social, es decir, los lazos que unen a los individuos en un colectivo. La solidaridad obliga a los individuos a actuar de acuerdo con algo más que sus propios intereses, generando un sentimiento de interdependencia. Durkheim señala que la división del trabajo es un fenómeno social y, por lo tanto, debe explicarse por factores sociales. Identifica tres factores clave para la diferenciación: 1. Volumen: el aumento en la cantidad de individuos en la sociedad. 2. Densidad material: la cantidad de interacciones físicas o comerciales entre los individuos. 3. Densidad moral: la calidad e intensidad de las relaciones sociales y las comunicaciones entre los miembros de la sociedad. La simple existencia de más personas no es suficiente para generar una diferenciación en las funciones. Es necesario que aumente también la densidad material y moral para que haya una mayor colaboración y especialización entre los individuos. Cuanto más elevadas son las interacciones sociales, más estrecha es la relación entre las personas, lo que impulsa la división del trabajo. Durkheim también discute la idea de que la división del trabajo no tiene como finalidad principal aumentar la producción, como proponen los economistas. Para él, el aumento de la producción es una consecuencia, pero no la razón principal. La división del trabajo surge como una respuesta a las nuevas condiciones sociales y permite a los individuos adaptarse y coexistir en un entorno cada vez más competitivo. Es, por lo tanto, una solución pacífica a la lucha por la vida. ya que evita la eliminación de rivales mediante la especialización de funciones. Causas de la división social Reenvía al estudio del medio social es decir, si la división del trabajo es un fenómeno esencialmente social, las causas también pueden ser sociales, en tanto es necesario eliminar cualquier tipo de explicación individual. Por consiguiente, la división de trabajo no se puede explicar por motivaciones individuales, la división del trabajo es un fenómeno social, es decir, una combinación de volumen, la densidad material y la densidad moral de la sociedad. De manera tal que el aumento de volumen (entendido como el número de individuos que pertenecen a una sociedad) no es causa suficiente de diferenciación si al mismo tiempo no aumenta la densidad material y moral (entendiendo a esta última como la intensidad de comunicaciones e intercambios de los individuos). Por 4 ende, cuanto más elevado es el número de relaciones entre individuos, más tienden a trabajar juntos y más estrechas serán sus relaciones comerciales y competitivas. De allí que la división de trabajo sea un fenómeno característico de la sociedad moderna, donde la lucha por la vida se hace más ardua; la misma se efectúa como una solución dulcificada que evita la eliminación de los rivales. Rescatando elementos de la teoría Darwinista, el autor refuta la visión de los economistas que vinculan la división del trabajo con el mero aumento de la producción, siendo dicho aumento, para Durkheim, solo una consecuencia del fenómeno, en tanto la especialización no se realiza para producir más, sino para poder vivir en las nuevas condiciones de existencia. Tal proceso puede darse en una sociedad ya constituida donde los individuos entre los que se entabla la lucha sean ya solidarios. Distinguimos dos tipos de solidaridad: ★ Solidaridad mecánica Típica de sociedades primitivas, donde los individuos están fuertemente cohesionados por semejanzas, con una conciencia colectiva dominante. En estas sociedades, las personas comparten roles y funciones similares, lo que fortalece la cohesión social. ✬ Sanciones represivas buscan castigar al individuo que ha violado una norma establecida por la conciencia colectiva. Estas sanciones son comunes en el **derecho penal**, donde el castigo sirve para preservar la cohesión social frente a actos que amenazan los valores compartidos. ★ Solidaridad orgánica Característica de las sociedades modernas o industriales, basada en la diferenciación de funciones y especialización. A medida que los individuos se especializan en diferentes roles, dependen más unos de otros, lo que fomenta una cohesión basada en la complementariedad. ✬ Sanciones restitutivas no buscan castigar al individuo, sino restaurar el equilibrio previo. Estas sanciones están presentes en el **derecho civil**, donde las disputas entre individuos se resuelven mediante la reparación del daño y el restablecimiento de las relaciones sociales. La división del trabajo es, pues, un resultado de la lucha por la vida; una solución dulcificada, ya que gracias a ella, los rivales no se ven obligados a eliminarse mutuamente, sino que pueden coexistir unos al lado de otros. Así, a medida que se desenvuelve, proporciona a un mayor número de individuos, que en sociedades más homogéneas estarían obligados a desaparecer, los medios de mantenerse y de sobrevivir. 5 La sociología comprensiva de Weber. Su propuesta sociológica, acción y acción social, la cuestión del sentido en la comprensión. Tipos ideales de acción social. Relaciones sociales. La dominación: sus tipos puros. Estado: funcionarios políticos y profesionales – burocracia. Un “individuo histórico”: el moderno capitalismo occidental. Sentido de una construcción racional de los motivos del ‘ethôs’ económico protestante: el papel de la profesión. El ‘espíritu’ del capitalismo y las prácticas religiosas ascéticas. Economía y sociedad - Weber. Max Weber, en su enfoque de la sociología comprensiva, busca entender las acciones humanas a través de la interpretación del sentido subjetivo que los individuos atribuyen a sus acciones. El método principal para lograr esta comprensión es el tipo ideal, que es una construcción conceptual utópica utilizada para comparar la realidad con el propósito de generar hipótesis sobre los fenómenos sociales. ✬ Acción y acción social Para Weber, una acción es cualquier conducta humana (interna o externa, hacer o no hacer) a la que el individuo le atribuye un sentido subjetivo. La acción social, por otro lado, es aquella que se orienta por las conductas de los demás y está vinculada a la intención de influir o tener en cuenta a otros. Este tipo de acción no está presente en todas las interacciones humanas, sino sólo en aquellas donde las conductas tienen un sentido intencionado que las orienta hacia otras personas. ✬ Tipos ideales de acción social Weber propone varios tipos ideales de acción social: 1. Acción racional con arreglo a fines: Está determinada por expectativas sobre el comportamiento de otros o del entorno, que son utilizados como medios para alcanzar un objetivo racionalmente calculado. 2. Acción racional con arreglo a valores: Está guiada por la creencia en el valor inherente de una conducta, sin importar su resultado, ya que se realiza por convicción. 3. Acción afectiva: Motivada por emociones o estados afectivos inmediatos. 4. Acción tradicional: Basada en costumbres profundamente arraigadas. ✬ Relaciones sociales El conjunto de estas acciones sociales forma lo que Weber llama **relaciones sociales**, que implican una interacción significativa entre los actores. Este tipo de relación no siempre implica solidaridad, pero sí una reciprocidad en el sentido de las acciones. ✬ Dominación y tipos de dominación Weber define la dominación como un tipo especial de poder en el que existe una probabilidad de que ciertos individuos obedezcan una orden de autoridad que perciben como legítima. La obediencia puede estar motivada por intereses o por la autoridad misma, y la disciplina implica la tendencia a obedecer de manera pronta y automática. Weber clasifica la dominación en varios tipos: 6 1. Dominación legal: Basada en un sistema de reglas y ejercida por un cuadro administrativo burocrático, el tipo más puro de dominación legal. 2. Dominación tradicional: Basada en la creencia en la santidad de tradiciones históricas y en la legitimidad de aquellos que, por tradición, tienen autoridad. 3. Dominación carismática: Basada en la devoción hacia una figura percibida como excepcional, ya sea por su santidad, heroísmo o capacidad ejemplar. ✬ Burocracia Weber identifica la burocracia como el aparato administrativo especializado, necesario para la persistencia de la dominación. La burocracia se caracteriza por la jerarquización, la especialización y la administración a través de reglas formales. ✬ Estado En cuanto al Estado, Weber lo define como una asociación política que reclama el monopolio de la coacción física legítima en un territorio determinado. Aunque el uso de la fuerza no es su único medio, sí es el medio específico que lo distingue de otras organizaciones sociales. La ética protestante - Weber. Encontramos como “eje”; Como acciones humanas particulares basadas en principios morales llegan a construir y a transformar la sociedad en la dirección del triunfo del capitalismo. Webber habla de una sociedad comprensiva → Fundamentos ↧↧↧ ★ Pq las cosas como son?. ★ Valores comparativos. Busca conectar una serie de principios religiosos (Ética protestante) con un mundo completamente individual con algunas prácticas económicas (Espíritu del capitalismo). (Apunte de clase 30/07/24) Webber intenta explicar por qué el capitalismo moderno se desarrolló predominantemente en Occidente. Él sostiene que la ética del trabajo y las creencias religiosas protestantes, especialmente las calvinistas, jugaron un papel crucial. Los calvinistas creían en la predestinación, lo que les hacía buscar señales de su salvación en el éxito material y el trabajo duro. Este enfoque llevó a una vida de disciplina, ahorro y reinversión, elementos clave para el desarrollo del capitalismo. Weber también analiza cómo, a diferencia de otras culturas que tenían conocimientos y técnicas avanzadas, fue en Occidente donde estas prácticas se racionalizaron y sistematizaron, dando lugar al capitalismo tal como lo conocemos hoy. Lo que hace Weber es rastrear una vinculación y causalidad significativa entre dos realidades; El espiritu del calvinismo y espíritu capitalista; Afirmando que hay una afinidad, una causalidad significativa. Para ver tal relación se debe entender primero el ethos (la visión propia del mundo) de los calvinistas. 1. Ascetismo intramundano. Renuncia al goce de los bienes terrenales. 2. Predestinación. Creencia que establece que ya están destinados a ser parte de los “elegidos” con dios o los “condenados” que irán al infierno. Estas dos cosas son pilares fundamentales, entre otras cosas, de la expansión del capitalismo. (Productividad y disciplina racional). ★ La renuncia y la reinversión para el mayor éxito/mayor producción son cuestiones básicas presentes desde los albores del capitalismo. ¿Qué serie de circunstancias ha determinado que sólo en Occidente hayan surgido ciertos hechos culturales que estuvieron orientados hacia su desarrollo de validez y alcances universales? Esferas en las que en Occidente se dio un desarrollo que no se estableció en otras civilizaciones; ★ Ciencia (Ciencias Naturales; Ciencias Jurídicas). ★ Arte. ★ Arquitectura. ★ Universidades (la formación de los especialistas). 7 ★ Organización de funcionarios especializados (burocracia) ★ Parlamentos (democracia representativa). ★ Constitución racionalmente establecida. Derecho racionalmente estatuido. ★ Administración de funcionarios especializados guiados por reglas racionales. ★ Capitalismo. Capitalismo: ★ No debe identificarse con el «afán de lucro ilimitado». Debe considerarse como una moderación racional de este impulso. ★ El capitalismo se identifica con el anhelo de obtener una ganancia dentro del marco de la continuidad y la racionalidad de la empresa capitalista. Aspira a una ganancia siempre renovada, a una rentabilidad, porque debe hacerlo. ★ Un acto de economía capitalista descansa en la expectativa de ganancia debida al juego de recíprocas probabilidades de cambio. Es decir, de probabilidades formalmente pacíficas de lucro. ★ Conducta racional basada en un cálculo previsible en el cual la ganancia final debe superar el valor monetario invertido inicialmente. Dentro de una economía capitalista todo esfuerzo individual no orientado a la probabilidad de conseguir una rentabilidad está condenado al fracaso. Habla también de prácticas capitalistas. Donde se persigue racionalmente un ingreso capitalista, la acción se halla orientada por un cálculo de capital. El valor monetario de los bienes poseídos debe superar el capital, es decir, el valor estimado en el balance de los medios que hacen posible ese ingreso. Lo decisivo es que se calcule una cuenta de capital en moneda. Lo determinante es que la orientación efectiva hacia una comparación entre la evaluación monetaria final y la evaluación monetaria invertida, sea lo que determina decisivamente el procedimiento económico En Occidente, el capitalismo ha adquirido su grado de importancia basándose sobre especies, formas y orientaciones del capitalismo que jamás existieron en otras partes. La figura de los aventureros capitalistas ha existido en todo el mundo. Occidente ha conocido una nueva clase, la organización racional capitalista del trabajo formalmente libre. La organización empresaria racional orientada a las posibilidades que presenta el mercado de bienes, no es el único fenómeno distintivo del capitalismo occidental. La misma no hubiera sido posible sin dos importantes elementos de desarrollo adicionales: 1. La separación de lo doméstico y lo empresarial→ capital de familia/ capital de empresa. 2. La contabilidad racional por medio de libros contables→ permite el cálculo. Las peculiaridades del capitalismo occidental han obtenido su actual significado recién a través de su relación con la organización capitalista del trabajo libre. Falta en todas partes, excepto en el Occidente moderno, el concepto de ciudadano y de burguesía y el proletariado como clase. Esto fue producto de la mudanza del campo a la ciudad, base del desarrollo económico. Desde un punto de vista puramente económico de la historia universal de la cultura nuestro problema central, se trata del surgimiento del capitalismo empresarial burgués, con su organización racional del trabajo libre. Este específico capitalismo está codeterminado por las posibilidades tecnológicas. Esto significa que el condicionamiento proviene de las particularidades de la ciencia de Occidente, en especial la matemática y las ciencias naturales. La tecnología basada en conocimientos científicos, crucial para el estilo de vida de las masas, fue impulsada por las ganancias económicas. Estas ganancias fueron posibles gracias a las características del orden social occidental, destacando la estructura racional del derecho y la administración, con leyes predecibles y reglas formales. Solo en Occidente se alcanzó este nivel de perfección técnico-jurídica y formal en la administración económica. ★ Racionalismo; Weber se pregunta por qué en otras partes del mundo no se desarrollaron de la misma manera la ciencia, el arte, la política y la economía como en Occidente. Dice que en Occidente hubo 8 un tipo de racionalización especial que permitió estos avances. Esta racionalización no se dio igual en todos lados; por ejemplo, algunas formas de vida mística también son racionales a su manera, aunque puedan parecer locas desde otro punto de vista. Explica que para que haya un desarrollo económico racional, no solo se necesita tecnología avanzada, sino también leyes claras y justas. Además, la gente tiene que estar dispuesta y ser capaz de comportarse de manera racional y práctica. En lugares donde la espiritualidad impedía este tipo de comportamiento, el desarrollo económico se veía obstaculizado. Tipos de Capitalismo: a) Aventurero: Se caracteriza por ser irracional y especulativo. Basado en la adquisición violenta a través del despojo, la explotación y el soborno. Los capitalistas aventureros juzgan sus oportunidades o bien de un modo irracional o bien basan su adquisición por medios violentos, ya sea por medio de la guerra en un momento determinado o el despojo continuo y fiscal explotando a los súbditos b) Industrial burgués: Propio de Occidente y está basado en una organización racional del trabajo libre, que no da lugar a la especulación irracional, permitiendo asimismo la comercialización Los requisitos para el surgimiento del capitalismo industrial son: 1) Tiene que existir una contabilidad racional y un Derecho libre. 2) También una separación entre la economía familiar y la economía industrial. 3) Trabajo libre. Relación Ética protestante – Espíritu del capitalismo: La religión protestante calvinista tiene ciertas conductas morales que promueven un mayor desarrollo del capitalismo. Esto quiere decir que no hay una relación causa efecto entre los dos tipos ideales, sino de afinidades electivas. Son dos opuestos que se atraen, se cruzan y luego siguen su camino paralelamente. Ética Protestante: Tiene como características principales el ascetismo intramundano (trabajo y ahorro) y el enriquecimiento como señal de predestinación a la salvación eterna. La administración correcta de los bienes de Dios en la tierra nos aseguraba la vida eterna (predestinación). Idea de profesión como la de profesar la religión a través del trabajo. Los protestantes responden a un espíritu materialista, impartiendo una educación de carácter técnico-industrial-mercantil que desarrolle las habilidades y aptitudes individuales. Esta educación determina una mentalidad económica progresista. Espíritu del Capitalismo: Caracterizado por la adquisición del dinero como el valor supremo de la vida. Por el ejercicio constante de una profesión como manera privilegiada para adquirir dinero, el trabajo como fin, no como medio. Por la racionalidad asentada en la actividad laboral que busca las maneras más adecuadas para obtener la máxima cantidad de riqueza. Por la austeridad. Weber introduce el concepto del "espíritu del capitalismo" como una noción compleja y multifacética que no puede ser definida fácilmente al inicio de su investigación. En lugar de eso, propone que este concepto debe ser construido progresivamente a partir de componentes históricos específicos y sólo puede ser completamente entendido al final de la investigación. Para Weber, el "espíritu" del capitalismo se manifiesta como un conjunto de relaciones históricas y culturales que están profundamente enraizadas en la idiosincrasia individual de los fenómenos que estudia​​. Para definir el espíritu del capitalismo, Weber se apoya en ciertos pre-conceptos propuestos por Franklin donde se muestra la idea del hombre honrado digno de crédito, por sobre todo, su compromiso de contribuir al aumento de su propio capital, una meta auto justificada que se da por obvia y sobrentendida. La honradez es útil porque permite obtener crédito, lo mismo que la puntualidad, laboriosidad o la mesura y por ello estas cualidades se consideran virtudes Según Weber, las virtudes promovidas por Franklin —como las mencionadas arriba — no son inherentemente éticas, sino utilitarias. Franklin veía estas virtudes como útiles porque facilitaban el éxito económico y la obtención de crédito, lo que a su vez contribuía al aumento del capital personal. 9 Para Franklin, el objetivo último no era simplemente la obtención de dinero, sino la acumulación de capital de manera continua y disciplinada, evitando cualquier forma de goce inmoderado. Esta mentalidad refleja una ética que se aparta del hedonismo y se enfoca en el trabajo y la acumulación de riqueza como fines en sí mismos​. Ascesis1 y espíritu capitalista Para lograr una visión abarcadora y en profundidad de la relación existente entre las concepciones básicas del protestantismo ascético y los acciones de la vida económica cotidiana, es necesario traer a colación aquellos escritos teológicos que es posible identificar como surgidos de la actividad pastoral práctica. Baxter se va a destacar entre muchos otros representantes literarios de la ética puritana. Lo que llama la atención de este autor en los juicios sobre la riqueza y su obtención es el énfasis puesto justamente sobre los elementos hedonistas del mensaje del nuevo testamento Según Aquino, la riqueza como tal constituye un grave peligro el afán de lograr la no solo carece de sentido frente a la superior importancia del reino de dios sino que también es algo moralmente dudoso. Según el cristianismo no es el ocio y el goce sino solamente la acción la que contribuye a aumentar la gloria de Dios. Es decir, el tiempo es infinitamente valioso porque cada hora perdida significa una hora restada al trabajo puesto al servicio de la gloria de Dios En concordancia, en la obra principal de Baxter encontramos una prédica constante sobre el trabajo duro, constante, físico o espiritual. El trabajo es el medio ascético más eficaz. Es el medio preventivo específico contra todas las tentaciones de la vida no limpia. La ascesis sexual en el puritanismo se diferencia de la monacal sólo en el grado, no en el principio fundamental, y resulta más extensa como consecuencia de abarcar incluso a la vida matrimonial. La relación sexual es lícita incluso en el matrimonio sólo como medio deseado por Dios para el aumento de su gloria. El trabajo constituye la finalidad misma de la vida en absoluto, la reticencia a trabajar es síntoma de la falta del estado de gracia. Ni la riqueza exceptúa a quien la posee de aquella norma incondicional. Porque, para todos sin distinción, la Divina Providencia ha dispuesto una profesión y cada uno debe reconocer y trabajar en ella, una orden directa que Dios le da al individuo para que lo honre a través de su accionar. La especialización de las profesiones, puesto que aumenta la habilidad del trabajador, produce un aumento cuantitativo y cualitativo de la producción y sirve, por lo tanto, al bien común, el cual es idéntico al bien del mayor número posible. Fuera de la profesión, el hombre pasa más tiempo en la holgazanería que en el trabajo. La utilidad de una profesión y su correspondiente agregado a Dios se rigen: 1. Por normas morales 2. Por la importancia de los bienes producidos para la comunidad 3. Como tercer criterio y el más importante en la práctica, el lucro de la economía privada. La riqueza es objetable sólo como tentación de holgazanería improductiva, el afán de obtenerla lo es cuando se orienta a poder vivir luego en forma despreocupada y desprejuiciada. Pero, como resultado del deber de trabajar, la riqueza no solo está moralmente permitida, sino que es algo directamente exigido. ★ Puntos en los que la concepción puritana de la profesión y la exigencia de una conducta ascética tuvieron que influenciar directamente el desarrollo del estilo de vida capitalista: La ascesis se dirige con toda su potencia contra una cosa: el goce despreocupado de la existencia y de las alegrías que la misma tiene. El goce espontáneo de la vida como tal, que desvía a la persona tanto del trabajo profesional como de la bienaventuranza, era un enemigo de la ascesis racional. 1 Ascesis (del griego "askesis", que significa "ejercicio" o "práctica") se refiere a la disciplina y el autocontrol rigurosos que una persona impone sobre sí misma. En el contexto religioso, especialmente en el cristianismo, la ascesis se relaciona con prácticas de austeridad y renuncia a los placeres mundanos para alcanzar un estado espiritual superior. 10 El permiso para la alegría que causa el goce puramente estético o deportivo de los bienes culturale, se encuentra con una barrera: estos bienes no deben costar nada; el hombre es tan solo un administrador de los bienes que le han sido otorgados por la gracia de Dios y es dudoso que sea lícito gastar algo para un fin que no sirve a la gloria de dios, sino al propio placer. Por consiguiente, la ascesis protestante mundana actúa con toda energía contra el disfrute irrestricto de la propiedad; limitó el consumo, especialmente el consumo suntuario. En contrapartida, en sus efectos psicológicos, liberó la adquisición de bienes de las trabas de la ética tradicional, rompió las cadenas que mantenían aherrojado al afán de lucro, no solo legalizando, sino viéndolo directamente como deseado por Dios. La ascesis protestante mundana, no pretendía imponer la privación al propietario, pero lo obligaba a emplear su propiedad en cosas necesarias y prácticamente útiles. Del lado de la producción de riqueza, en la economía privada la ascesis luchó tanto contra las injusticias como contra el afán de lucro puramente impulsivo. Lo condenable era el afán de riqueza que tenía como objetivo último el ser rico, ya que la propiedad como tal era solo una tentación Weber explica que los protestantes veían el laburo profesional no solo como una forma de ganarse la vida, sino como una prueba de su fe y salvación. Trabajar duro y ser ahorrativo era una manera de mostrar que estaban bien con Dios. Esto hizo que la gente se esforzara más en sus trabajos, porque creían que así demostraban su fe. Además, esta ética no solo hacía que la gente quisiera ganar plata, sino que también les enseñaba a no gastar de más. Así que, mientras más ganaban y menos gastaban, más plata les quedaba para invertir. Esto ayudó a formar el capital necesario para que el capitalismo se desarrollara. Cada vez que aumenta la riqueza el contenido de la religión disminuye en la misma medida. Es que la religión tiene que generar tanto laboriosidad como frugalidad, y estos no pueden menos que producir riqueza. Pero si aumenta la riqueza también el orgullo, la pasión, y el amor por el mundo en todas sus formas. De este modo, la forma de la religión permanece pero el espíritu desaparece progresivamente. Surgió así un ethos profesional burgués, con la seguridad de contar con la plena gracia de Dios y de estar bendecido por Él. El empresario burgués podía y debía perseguir sus intereses lucrativos dentro de los límites de lo formalmente correcto La organización racional de la vida sobre la base de la idea de la profesión es uno de los elementos constitutivos del espíritu capitalista moderno y de la cultura moderna. Este elemento nació del espíritu de la ascesis cristiana. ★ Cosas dichas; Espacio social y poder simbólico. El autor designa a su obra como “constructivismo estructuralista” o estructuralismo constructivista”. ★ Estructuralista: Referido a que en el mundo social existen estructuras objetivas independientes de la consciencia y voluntad capaces de orientar y coaccionar las practicas. ★ Constructivismo: Establece que existe una génesis social de los esquemas de percepción, pensamiento y acción dentro de las estructuras de las clases sociales Objetivismo Subjetivismo Trata a los hechos sociales como “cosas” y Reduce el mundo social a las representaciones que de él deja delado el hecho de que son objetos de se hacen los agentes. La tarea de la cs social es producir conocimiento en la existencia social un “informe de los informes” producidos por los objetos sociales 11 La vida social debe explicarse no por la La realidad social tiene un sentido y una estructura de concepción de aquellos que en ella pertinencia específica para los seres humanos que viven, participan, sino por las causas profundas actúan y piensan en ella que escapan de la cc Inclinación positivista a concebir las Por una serie de construcciones de sentido común, los clasificaciones como recortes operatorios o individuos preseleccionan y preinterpretan ese mundo que como un registro mecánico de aprehenden como la realidad de su vida cotidiana. Los discontinuidades objetivas objetos de pensamiento determinan el comportamiento, motivándolo El conocimiento científico se obtiene por El conocimiento está en continuidad con el conocimiento una ruptura con las representaciones de sentido común, que es una “construcción de primeras (“prenociones” en Durkheim e construcciones” “ideología” en Marx) que conduce a las causas inconscientes Marx y Durkheim Schutz (fenomenología) y Garfinquel (etnometodología) Error: nos induce a deducir las acciones y Error: nos induce a reducir las estructuras a las las interacciones de la coacción estructural interacciones Espacio social: Es un espacio estructurado de posiciones, lo califica como una topología social, se observan relaciones de posiciones, de lugares (distancias, vecindades). Las distancias o vecindades espaciales representan distancias o vecindades sociales. Habitus: Un habitus es una estructura estructurada estructurante. Son categorías de percepción y apreciación de ciertas prácticas o intereses. Adquirido por la trayectoria en cierto campo y la acumulación e intercambios de capitales. Ciertos gustos, indiferencias, costumbres, etc. El habitus depende del lugar que se ocupa en el espacio social. Estos agentes se distribuyen y circulan por el espacio social ocupando posiciones que dependen de la acumulación e intercambio de las distintas especies de capital, son estructuras que los determinan. El capital es la energía o poder social que un agente cree haber acumulado, adquiere energía de acuerdo a ciertas condiciones específicas/contingentes dadas en relación con los demás. El capital solo existe en acto, es decir que es válido solo cuando opera en una competencia social. Esto no es incorporado por todos de la misma manera, los agentes poseen volúmenes de capital diferentes de acuerdo a las oportunidades a las que accedan, y los agentes interactúan con los de la misma situación en el espacio social. 12 Tipos de capitales: ★ Económico: Se refiere al conjunto de bienes materiales que posee el agente, el patrimonio. Social: Sistema de relaciones que establece un agente a lo largo de su vida, que son capaces de ser utilizadas como recurso en determinada competencia social. Esto quiere decir, que se hace valer en medida que se ejerce. ★ Cultural: Se puede poseer de tres maneras: a. En estado incorporado: Aquello que el agente incorpora como una habilidad, se relaciona con un saber hacer, se adquiere de manera invisible y no se acumula, no es hereditario. b. En estado objetivado: Bienes culturales u objetos como libros, cuadros, instrumentos… Este se posee físicamente, y solo es objetivado si se tiene consciencia y se lo interpreta como este. c. En estado institucionalizado: Objetos que poseen un reconocimiento a nivel Estado, como un título universitario, que demuestra a los agentes poseer cierta habilidad, cierto saber hacer. ★ Simbólico: Tiene que ver con el prestigio, fama y reconocimiento que se tenga frente a otros agentes. Existen ordenamientos simbólicos que hacen que las cosas funcionen de determinada manera, estos ordenamientos hacen valer otros capitales. Son las cualidades portadoras de otros capitales. Se pone en juego constantemente en las luchas simbólicas, las cuales se producen por parte de los agentes para obtener capital simbólico. ○ Quien posea este capital, también posee poder simbólico, que otorga reconocimiento de la posición, reconocimiento como autoridad legítima a ciertos enunciados, autoridad performativa, permite establecer cierto sentido común. ★ Sociología y cultura; Algunas propiedades de los campos. Campo: Un campo es un espacio estructurado de posiciones, caracterizado por invariantes propias de cualquiera de ellos: algo que está en juego en él y jugadores interesados en jugar. Los campos tienen leyes generales, leyes de funcionamiento invariantes -mecanismo universales- de unos a otros. Por eso, Bourdieu propone una teoría general de los campos. La creencia es constitutiva de la pertenencia a un campo. Para que un campo funcione es necesario que haya algo en juego y agentes dispuestos a jugar, dotados de un habitus específico que implica el reconocimiento de las leyes inmanentes al juego/de lo que está en juego, de la historia del campo. Un campo es, a la vez, un terreno de lucha en que los contendientes comparten un acuerdo sobre el interés que tienen en la existencia misma del campo y se disputa la adquisición del capital específico según unas reglas establecidas por quienes concentran mayores montos de ese capital. Se entiende por CAPITAL ESPECÍFICO a aquel capital que vale en relación con un campo determinado y que solo se puede convertir en otra especie de capital dentro de ciertas condiciones. Esta relación de creencia, de interés, de investimento es tanto más total, más incondicional cuando se ignora como tal. Adquirir el habitus específico de un campo implica adquirir el sentido del juego como arte de anticipar prácticamente el porvenir inscripto en el presente. La estructura de un campo es un estado de las relaciones de fuerza entre agentes o instituciones que intervienen en la lucha. Están los que monopolizan el capital específico y desarrollan estrategias para conservarlo (ortodoxia), y quienes disponen montos menores de ese capital y desarrollan estrategias de subversión para apropiárselo (herejía). 13 Las estrategias subversivas no son estrategias de destrucción del campo sino que son las estrategias destinadas a invertir la correlación de fuerza. Siempre se presentan como modos más “fieles” para aproximarse a ese algo que está en disputa. Así, las estrategias, no son el cálculo consciente de un sujeto, sino, una relación inconsciente entre un habitus y un campo; estrategias entendidas como acciones objetivamente orientadas hacia fines que pueden no ser los que se persiguen subjetivamente. Efectos del campo: Bourdieu supone que no se puede comprender el valor de un signo (u objeto) sin incorporar la historia de su campo de producción (habitus específico). Un problema solo lo es en el marco del sistema de legitimidad de un campo, por tanto, la transformación de los problemas y temas son el producto, el efecto automático de la pertenencia al campo y del dominio de su historia especific 14 15 ★ MARX: Trabajo asalariado y capital: En este texto se analiza mas de cerca las relaciones económicas entre la burguesía y su denominación de clase, así como la esclavitud de los obreros. Tres apartados: ★ La relación entre el trabajo asalariado y el capital, la esclavitud del obrero, la denominación del capitalista. ★ La inevitable ruina bajo el sistema actual de las clases medias burguesas y del llamado estamento campesino. ★ El sojuzgamiento y la explotación comercial de las clases burguesas de las distintas naciones europeas por Inglaterra, el déspota (soberano) del mercado mundial ¿Qué es el salario? ¿Cómo se determina? ★ Si preguntamos a los obreros qué salario perciben, uno nos contestará: «Mi burgués me paga un marco por la jornada de trabajo»; el otro: «Yo recibo dos marcos», etc. Según las distintas ramas del trabajo a que pertenezcan, nos indicarán las distintas cantidades de dinero que los burgueses respectivos les pagan por la ejecución de una tarea determinada, v.gr., por tejer una vara de lienzo o por componer un pliego de imprenta. Pero, pese a la diferencia de datos, todos coinciden en un punto: el salario es la cantidad de dinero que el capitalista paga por un determinado tiempo de trabajo o por la ejecución de una tarea determinada. ★ Por tanto, diríase que el capitalista les compra con dinero el trabajo de los obreros. Estos le venden por dinero su trabajo. Pero esto no es más que la apariencia. Lo que en realidad venden los obreros al capitalista por dinero es su fuerza de trabajo. El capitalista compra esta fuerza de trabajo por un día, una semana, un mes, etc. Y, una vez comprada, la consume, haciendo que los obreros trabajen durante el tiempo estipulado. ★ La fuerza de trabajo es, pues, una mercancía, ni más ni menos que el azúcar. Aquélla se mide con el reloj, ésta, con la balanza. Los obreros cambian su mercancía, la fuerza de trabajo, por la mercancía del capitalista, por el dinero y este cambio se realiza guardándose una determinada proporción: tanto dinero por tantas horas de uso de la fuerza de trabajo. …El obrero ha cambiado su mercancía, la fuerza de trabajo, por otras mercancías de todo género, y siempre en una determinada proporción. Al entregar dos marcos, el capitalista le entrega, a cambio de su jornada de trabajo, la cantidad correspondiente de carne, de ropa, de leña, de luz, etc. Por tanto, los dos marcos expresan la proporción en que la fuerza de trabajo se cambia por otras mercancías, o sea el valor de cambio de la fuerza de trabajo. Ahora bien, el valor de cambio de una mercancía, expresado en dinero, es precisamente su precio. Por consiguiente, el salario no es más que un nombre especial con que se designa el precio de la fuerza de trabajo, o lo que suele llamarse precio del trabajo, el nombre especial de esa peculiar mercancía que sólo toma cuerpo en la carne y la sangre del hombre. ★ Por tanto, el salario no es la parte del obrero en la mercancía por él producida. El salario es la parte de la mercancía ya existente, con la que el capitalista compra una determinada cantidad de fuerza de trabajo productiva. ★ La fuerza de trabajo es, pues, una mercancía que su propietario, el obrero asalariado, vende al capital. ¿Para qué la vende? Para vivir. Ahora bien, la fuerza de trabajo en acción, el trabajo mismo, es la propia actividad vital del obrero, la manifestación misma de su vida. Y esta actividad vital la vende a otro para asegurarse los medios de vida necesarios. Es decir, su actividad vital no es para él más que un medio para poder existir. Trabaja para vivir. El obrero ni siquiera considera el trabajo parte de 1 su vida; para él es más bien un sacrificio de su vida. ★ Lo que el obrero produce para sí no es la seda que teje ni el oro que extrae de la mina, ni el palacio que edifica. Lo que produce para sí mismo es el salario. ★ …la vida comienza allí donde terminan estas actividades, en la mesa de su casa, en el banco de la taberna, en la cama. Las doce horas de trabajo no tienen para él sentido alguno en cuanto a tejer, hilar, taladrar, etc., sino solamente como medio para ganar el dinero que le permite sentarse a la mesa o en el banco de la taberna y meterse en la cama. ★ La fuerza de trabajo no ha sido siempre una mercancťa. El trabajo no ha sido siempre trabajo asalariado, es decir, trabajo libre. El esclavo no vendía su fuerza de trabajo al esclavista. El esclavo junto a su fuerza de trabajo, es vendido de una vez y para siempre a su dueño. Él es una mercancía, pero su fuerza de trabajo no es una mercancía suya. El siervo de la gleba solo vende una parte de su fuerza de trabajo. No es él quien obtiene un salario de propietario del suelo; por el contrario, es este, el propietario del suelo, quien percibe de él un tributo. En cambio, el obrero libre se vende él mismo y, además, se vende en partes. El obrero no pertenece a ningún propietario ni está adscrito al suelo, pero las 8, 10 u 12 horas de su vida cotidiana pertenecen a quien se las compra. ★ El salario es, como hemos visto, el precio de una determinada mercancía, de la fuerza de trabajo. Por tanto, el salario se halla determinado por las mismas leyes que determinan el precio de cualquier otra mercancía. Ahora bien, nos preguntamos: ¿Cómo se determina el precio de una mercancía? 1. Competencia entre vendedores: abarata el precio de las mercancías puestas a la venta. La misma mercancía es ofrecida por diversos vendedores, por eso unos venden más barato q otros. 2. Competencia entre compradores: hace subir el precio de las mercancías puestas a la venta. 3. Competencia entre compradores y vendedores: unos quieren comprar lo más barato posible, otros vender lo más caro q puedan. El resultado de esta competencia entre compradores y vendedores dependerá de la relación existente entre los otros 2 aspectos anteriores. ★ el precio corriente de una mercancía es siempre inferior o superior a su costo de producción. ★ La determinación del precio por el coste de producción equivale a la determinación del precio por el tiempo de trabajo necesario para la producción de una mercancía, pues el coste de producción está formado: 1) por las materias primas y el desgaste de los instrumentos, es decir, por productos industriales cuya fabricación ha costado una deter cantidad de jornadas de trabajo y q representan, por tanto, una deter cantidad de tiempo de trabajo; y 2) por el trabajo directo; cuya medida es tmb el tiempo. ★ Las mismas leyes generales que regulan el precio de las mercancías en general regulan también, naturalmente, el salario, el precio del trabajo. La remuneración del trabajo subirá o bajará según la relación entre la demanda y la oferta, según el cariz que presente la competencia entre los compradores de la fuerza de trabajo, los capitalistas, y los vendedores de la fuerza de trabajo, los obreros. A las oscilaciones de los precios de las mercancías en general les corresponden las oscilaciones del salario. Pero, dentro de estas oscilaciones, el precio del trabajo se hallará determinado por el coste de producción, por el tiempo de trabajo necesario para producir esta mercancía, que es la fuerza de trabajo.Ahora bien, ¿cuál es el coste de producción de la fuerza de trabajo? Es lo que cuesta sostener al obrero como tal obrero y educarlo para este oficio 2 El salario, o el precio del trabajo, se regula igual que el precio de cualquier mercancía, siguiendo las leyes de oferta y demanda. Subirá o bajará dependiendo de la competencia entre capitalistas y obreros. Aunque el salario fluctúa como los precios de otras mercancías, a largo plazo se determina por el costo de producir la fuerza de trabajo, es decir, lo necesario para mantener y educar al trabajador. ★ Por tanto, cuanto menos tiempo de aprendizaje exija un trabajo, menor será el coste de producción del obrero, más bajo el precio de su trabajo, su salario. En las ramas industriales que no exigen apenas tiempo de aprendizaje, bastando con la mera existencia corpórea del obrero, el coste de producción de éste se reduce casi exclusivamente a las mercancías necesarias para que aquél pueda vivir en condiciones de trabajar. Por tanto, aquí el precio de su trabajo estará determinado por el precio de los medios de vida indispensables. Pero hay que tener presente, además, otra circunstancia. El fabricante, al calcular su coste de producción, y con arreglo a él el precio de los productos, incluye en el cálculo el desgaste de los instrumentos de trabajo. Si una máquina le cuesta, por ejemplo, mil marcos y se desgasta totalmente en diez años, agregará cien marcos cada año al precio de las mercancías fabricadas, para, al cabo de los diez años, poder sustituir la máquina ya agotada, por otra nueva. Del mismo modo hay que incluir en el coste de producción de la fuerza de trabajo simple el coste de procreación que permite a la clase obrera estar en condiciones de multiplicarse y de reponer los obreros agotados por otros nuevos. El desgaste del obrero entra, por tanto, en los cálculos, ni más ni menos que el desgaste de las máquinas. Por tanto, el coste de producción de la fuerza de trabajo simple se cifra siempre en los gastos de existencia y reproducción del obrero. El precio de este coste de existencia y reproducción es el que forma el salario. El salario así determinado es lo que se llama el salario mínimo. Al igual que la determinación del precio de las mercancías en general por el coste de producción, este salario mínimo no rige para el individuo, sino para la especie. Hay obreros, millones de obreros, que no ganan lo necesario para poder vivir y procrear; pero el salario de la clase obrera en conjunto se nivela, dentro de sus oscilaciones, sobre la base de este mínimo. El párrafo explica que el salario de un trabajador depende del tiempo de aprendizaje que requiere su trabajo y del costo de producción de su fuerza de trabajo. Si un trabajo no necesita mucho aprendizaje, el salario será más bajo porque el costo de mantener al obrero se reduce a lo necesario para vivir y trabajar. Además, el costo de producción de un obrero incluye también el costo de su "desgaste", similar al desgaste de una máquina. Esto significa que el salario debe cubrir tanto su mantenimiento como su capacidad de procrear, asegurando así la reposición de trabajadores. Este salario mínimo, determinado por el costo de existencia y reproducción, se aplica a la clase obrera en general, aunque no todos los obreros individuales ganen lo suficiente para vivir y procrear. ★ el Costo de producción de la fuerza de trabajo es: Lo q cuesta mantener al obrero como tal (costo de vida del obrero). El precio de su trabajo estará determinado por el precio de los medios de vida indispensables. Lo q cuesta educar al obrero para el oficio (+ tiempo de aprendizaje = + especialización = + costo de producción). Lo q cuesta la procreación del obrero (el desgaste del obrero entra en cálculos igual q el desgaste de las máquinas). Por tanto, el coste de producción de la fuerza de trabajo simple se cifra siempre en los gastos de existencia y reproducción del obrero. El precio de este coste de existencia y reproducción es el q forma el salario. El salario así determinado es lo q se llama el salario mínimo, q no rige para el individuo, sino para la especie. Hay obreros q no ganan lo necesario para poder vivir y procrear; pero el salario de la clase obrera en conjunto se nivela, dentro de sus oscilaciones, sobre la base de este mínimo. 3 ★ (Clase 14/05/24 practico) El capital está formado por: Materia prima, herramientas e instrumentos de trabajo, medios de vida – fuerza de trabajo. Todas estas partes integrantes del capital son producto del trabajo acumulado, y se emplean para producir nuevamente, para seguir produciendo. ★ (pg 15.) En la producción, los hombres no actúan solamente sobre la naturaleza, sino q actúan también los unos sobre los otros. Para producir los hombres contraen determinados vínculos y relaciones sociales de producción q varían según los medios de producción. El trabajo acumulado q sirve de medio de nueva producción es el capital. Las relaciones de producción en su conjunto conforman las relaciones sociales, y con

Use Quizgecko on...
Browser
Browser